A Francisco González Jaimes el destino le tenía preparado un final aparatoso. Falleció el jueves pasadas las 3:30 de la tarde cuando el vehículo en el que iba se salió de la vía y rodó por un barranco más de 300 metros, en la vía que comunica a San Andrés con Cepitá.
Al parecer, el hombre, de 92 años, quien iba como pasajero murió de manera instantánea. No alcanzaron a llegar los socorristas para intentar auxiliarlo.
El siniestro fue puesto en conocimiento de las autoridades por parte de varios testigos que vieron cuando el Chevrolet Sprint, color gris, de placas BUK-017, desapareció del panorama justo cuando se movilizaba por la vereda Alto de Jaimes, en el sector conocido como quebrada La Honda, de San Andrés.
Por causas que aún no han sido establecidas por las autoridades, el vehículo perdió el control y terminó yéndose cuesta abajo por aquella carretera terciaria. Se presume que se trataría de posibles fallas mecánicas; sin embargo, hasta el momento no se ha establecido qué fue lo que pasó.
Luis Antonio González López, de 60 años, quien iba al frente del volante, corrió con suerte, sufrió varias heridas y fue trasladado hasta el hospital de Málaga. Se desconoce cuál es su estado de salud.
Al parecer, tanto el conductor como el pasajero serían familiares. Los dos vivían en la finca Carabalí de la vereda Los Pinos, de San Andrés.