“Esto pasó hace un poco más de 20 años. En la pierna izquierda, en la parte de atrás, supuestamente me pusieron una mesoterapia para quitar la celulitis y era un relleno de biopolímeros”.
Por desgracia, Estefanía desarrolló una esclerodermia amorfa, un trastorno inmunológico degenerativo que hace que las células del cuerpo, en lugar de producir colágeno, empiecen a comérselo.
“Con el médico hicimos un escaneo general del cuerpo, me retiré las prótesis mamarias, me hicieron una lipo para retirarme ese procedimiento y estoy bien, pero ajá después de una lipo la piel queda horrible, no queda igual. Por eso les digo ojo, pilas, dejen de hacerse mar/%#. Yo me la hice porque era la única forma de quitarme esa vaina”, agregó Borge.
Y pese a las críticas que le han hecho por haberse retirado sus implantes, ella afirma que fue la mejor decisión que pudo tomar en toda su vida. Estefanía Borge actualmente lleva un estilo de vida saludable, a punta de alimentación balanceada y una juiciosa rutina de ejercicios.
