La pareja se encontraba aun descansando hacia las 6:20 de la mañana del viernes, en el que se suponía era el lugar más seguro para ellos: su humilde hogar, hecho de madera y láminas de zinc, en cercanía a la cancha del sector.
En esa vivienda también estaría un hijo mayor de Raussy, sin embargo, el descomunal peso de aquel tronco sepultó solo a los esposos y dejó al joven con vida para enfrentar esta sobrecogedora tragedia.
Las ramas alcanzaron a destrozar parte de la malla y un arco de la cancha, además de otras dos casas, como mínimo, pero los vivientes de estas también lograron sobrevivir en medio de los gritos y el desconcierto por lo ocurrido.
Al lugar llegaron los uniformados del Cuerpo de Bomberos y de la Policía para revisar a los heridos y cortar con varias sierras aquel árbol que parecía un ‘pulpo’ extendiéndose en la zona.
Luego de casi dos horas de labores le abrieron paso al CTI para que llevara los cuerpos de Jorge (de 39 años) y de Raussy (de 40) al a morgue.
En medio del nerviosismo por lo ocurrido, la mayor expresión de los habitantes era el miedo porque se repitiera la historia, ya que como el árbol de la tragedia hay muchos otros casi ‘colgando’ de un barranco erosionado, asomándose sobre más viviendas en una amenaza constante.