La labor ilegal que cometía Robinson Garnica Molina y José Alirio García Rey, en el Magdalena Medio, quedó en evidencia durante un operativo adelantado por la Policía y la Fiscalía.
Hurtaban ganado para posteriormente llevarlo a sus fincas donde era guardado y luego trasladarlo a mataderos clandestinos en pequeñas cantidades para posteriormente comercializarlo en las carnicerías de Barrancabermeja y el corregimiento El Centro, las cuales están siendo investigadas.
Los dos estarían involucrados en el hurto de aproximadamente 150 cabezas de ganado y tenían orden de captura por parte del Juzgado 4 Penal Municipal de Barrancabermeja, por los delitos de concierto para delinquir en concurso heterogéneo y simultáneo con abigeato.