Después de 20 meses de estar cerrado, a causa de la pandemia del COVID-19, el Parque del Agua reabre sus puertas con su espectacular iluminación navideña. De esta manera, el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga busca posicionarlo nuevamente como uno de los más importantes sitios de encuentro para la ciudadanía en general.
A partir del miércoles 1 de diciembre, se podrá acceder a este escenario, justo cuando se haga la inauguración de ‘Navidad en familia, es tiempo de reencontrarnos’. El valor de la entrada será de aproximadamente $8.000 por persona, sin embargo se tendrán boletas de cortesía para ciertos días de la semana.
Las luces, adornos navideños, así como las funciones y presentaciones artísticas y culturales se podrán disfrutar, entre las 5:00 p.m. y las 11:00 p.m. La programación se extenderá hasta el 10 de enero de 2022 y se dará a conocer a través de las redes sociales del Acueducto.
Hernán Clavijo, gerente general del Acueducto Metropolitano de Bucaramanga, le dijo a Q´hubo que se abrirá el parque todos los días y “las personas adultas podrán ingresar presentando el carné de vacunación, a los niños no se les exigirá. Además de la iluminación característica, puntos de comida, se tendrán dos sesiones del espectáculo central, hacia las 7:00 p.m. será uno y, otro, hacia las 9:00 p.m.”, sostuvo.
Según el gerente, hace más de seis meses se viene trabajando en la estructuración de esta nueva apertura, que justo se da para la que es considerada la época más especial del año. “Creemos que va a ser una sorpresa muy agradable para todos los ciudadanos del área metropolitana de Bucaramanga”, acotó.
El aforo del Parque del Agua, ubicado en el sector de Guarín, será del 100%, pero para el desarrollo de algunas de las actividades se reducirá dicho porcentaje. Además se dispondrá de equipos de seguridad y control de protocolos de bioseguridad tanto en la entrada, como al interior.
Por otra parte, Clavijo manifestó que, desde el 16 de marzo de 2020, cuando las puertas del lugar se cerraron se han realizado actividades permanentes de conservación y mantenimiento de las zonas verdes, espejos de agua y de las especies de fauna y flora que allí se tienen.
Así las cosas, “el lugar está en perfectas condiciones, pero sí nos ha tocado hacer unas inversiones adicionales en adecuaciones para garantizar la seguridad de las personas”, aseveró.