Definitivamente el proyecto de pavimentación de la vía de acceso al barrio José Antonio Galán, presentado por la Alcaldía de San Gil al Departamento de Prosperidad Social, DPS, no va.
Los cerca de 250 metros identificados como zona de alto riesgo y en donde se requieren obras de mitigación para que un ente del estado apruebe cualquier iniciativa de intervención vial, fueron el motivo de la decisión que evitó la llegada de una inversión por $2.100 millones de las arcas de la nación.
La confirmación de esta información fue entregada por Hermes Rodríguez, alcalde de San Gil.
Entendiendo que mejorar la conectividad es uno de los compromisos con la comunidad que reside en este sector del municipio, el mandatario dijo que se harán dos intervenciones en proyectos viales con recursos propios.
Los dineros saldrían del empréstito por $6.000 millones que la alcaldía está tramitando ante entidades bancarias y que el Concejo Municipal le aprobó en septiembre pasado.
Las obras proyectadas sumado a la construcción de un kilómetro de placas huellas que conectan a los barrios Torres del Castillo con José Antonio Galán que adelanta la Gobernación de Santander, Ortiz indicó que se hará una asignación de recursos para dos proyectos Uno en la vía de acceso principal que conecta al barrio con la carretera que va de San Gil a Charalá.
En los casi dos kilómetros de recorrido se tiene planteada una inversión de $600 millones que tendrá como objetivo principal atender los puntos más difíciles y especialmente la reposición y ampliación del pavimento en tramos que resultan muy peligrosos por ser muy estrechos.
La segunda obra será la pavimentación de la carrera 19, que va desde Cerros de la Cruz hasta la parte alta de José Antonio Galán. El proyecto está siendo estructurado y se financiará junto al otro con los recursos del préstamo, aseguró Ortiz.
