Tras brillar por segunda ocasión consecutiva en unos Juegos Olímpicos, el pesista colombiano Luis Javier Mosquera con una sonrisa en el rostro expresó el orgullo que siente por ganar, por segunda vez, una medalla olímpica, pero hizo un llamado de atención a todas las personas que los atacaron.
Por su parte Mercedes Pérez entre lágrimas hizo énfasis en el valor de la mujer resiliente.
“Estoy orgulloso de lo que he hecho. En Río no gané en el podio. Estuve triste por eso. Cuando competi pensaba en eso. Lo logré. Fueron muchos años de entreno y problemas, dijo Luis Javier Mosquera en la rueda de prensa en Bogotá.
El vallecaucano también se refirió a la presión que tuvieron que enfrentar, no solo en los juegos sino producto de la sanción que les impidió llevar ocho pesistas a competir en estas justas.
“Muchas veces me sentí muy atacado incluso por los mismos colombianos de nuestro mismo deporte y este es un llamado de atención a todas las personas que no saben por todo lo que hemos pasado” añadió Mosquera.
Agregó que estos ataques generaron muchas presión en ellos, pues esto se sumó a la difícil situación que tuvieron que enfrentar por los casos de doping que generaron que solo pudieran estar tres pesistas en competencia: “por eso me desconecte de las redes sociales 15 días antes de viajar a los Juegos Olímpicos, porque estas son un arma de doble filo, porque te elevan pero también te pueden tirar al suelo de un momento a otro”, añadió Mosquera.
Por esta razón les envió un mensaje a los colombianos: “Yo quiero que se sientan orgullosos, porque sé que cuatro de los compañeros no pudieron venir, pero nosotros hicimos todo, entrenamos con todo el corazón, tuvimos muchas de dolor, de lágrimas, pero yo sé que nosotros vamos a seguir dándolo todo”.
Puntualizó que se siente muy feliz a pesar de todo esto, y que está motivado para dejar este legado: “que siempre he querido dejar en mi pueblo, yo primero quería ser ese embajador en mi municipio, y ahora en Colombia y el mundo, y tengo los pies en la tierra y se lo que quiero en la vida, y seguir trabajando para montarnos en París en el podio”.
Concluyó diciendo que: “los sueños sí se pueden lograr a pesar de las dificultades”.
Por su parte la también pesista Mercedes Perez, diploma olímpico en Tokio, tras obtener el cuarto lugar en su categoría, con lágrimas en los ojos y la voz entrecortada dijo que ama cuando compite: “siento el deporte, a mi me corre en las venas, mi corazón grita y yo quiero hacerle transmitir a todas esas personas que están al frente de un televisor o que están al frente mió, que sientan lo que yo siento, porque yo amó esto”.
Agregó que el deporte le ha enseñado a ser mujer perseverante y que se siente orgullosa de ser colombiana: “me siento orgullosa de ser lo que soy, de ser la mujer de esas voces que están detrás de uno pidiéndole que nos escuchen, lloro porque estoy aquí, porque demuestro lo que soy, porque demuestro con mi alma y corazón lo puro que es el trabajo de nosotros”.
Añadió que sin tener una medalla olímpica se siente ganadora: «porque la mujer colombiana fue triunfadora al cien por cien y me siento tan orgullosa de lo que hice. Ese día (competencia) pedí perdón, pero hoy que tengo la cabeza fría digo esas palabras de perdón fue humildad a un pueblo tan sufrido que somos”
Aprovechó para enviar un mensaje a todas las mujeres: “nosotros como mujeres tenemos mucho por mostrar a Colombia, a todo un País, de que somos fuertes, muy fuertes”.
