Aleida Padilla Berrocal, de 45 años, está desaparecida desde el 8 de agosto de 2024. Ese día madrugó y salió de su casa, ubicada en el barrio Álamos de Rionegro (Santander), para dirgirse a su lugar de trabajo en el sector de Cabecera, en Bucaramanga.
La mujer laboraba en oficios varios y esa semana estaba limpiando una casa en la capital santandereana.
No le dijo nada extraño a su hijo de 10 años; simplemente se despidió. Desde entonces empezó la tortura para su familia, conformada por su esposo Libardo Piña y sus dos hijos menores de edad. Aleida, oriunda de Córdoba, no se ha comunicado con nadie.
“No sabemos qué pasó. El niño fue el que me contó que ese día ella madrugó y se fue. No supe cómo iba vestida, porque yo trabajo como transportador y no estaba en casa”, afirmó Libardo Piña, su cónyuge.
De acuerdo con el testimonio de su familiar, la mujer nunca llegó a su trabajo. “Llamamos al jefe y él nos dijo que ese día ella no se presentó en el apartamento. No sabemos si le pasó algo en el camino. Si está con alguien o le hicieron daño”, agregó Libardo Piña.
Uno de los aspectos que más llamó la atención a su pareja sobre la desaparición de su esposa es que Aleida llevaba varios meses atrasándose con las cuentas, el pago del arriendo y otras obligaciones económicas.
“Yo le daba dinero para pagar algunas cosas, ella tenía una tarjeta, pero no sé por qué no se puso al día con eso”, explicó.
Así puede reconocer la mujer desaparecida en Santander
Sus familiares ya pusieron la denuncia por desaparición ante la Fiscalía General de la Nación y suministraron los datos claves para identificarla.
Aleida es una mujer robusta, de cabello negro y largo. Tiene ojos oscuros y medianos. Su boca es gruesa y tiene el lóbulo de sus orejas adherido. La nariz es achatada. Mide metro con 77 centímetros.
Si usted tiene información sobre su paradero, puede comunicarse al Grupo de Búsqueda de Desaparecidos de la Fiscalía al número 3167422213, a la extensión 72344 o 72360