Una mujer en bikini se subió a una tanqueta militar y mostró sus senos a los bañistas en una playa de Ecuador. El hecho capturado en video ha generado gran revuelo en las redes sociales y provocó una respuesta formal de las Fuerzas Armadas.

El baile y la exhibición ocurrieron el domingo 7 de julio de 2024 en la playa El Murciélago, en Manta, una ciudad costera de Ecuador considera el ‘centro de negocios del crimen organizado’ y temporalmente ‘sede de las cúpulas policial y militar’.

Según el comunicado oficial del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador, el personal militar se encontraba realizando operaciones de control en cumplimiento del Decreto Ejecutivo No. 290, que tiene como objetivo reforzar la seguridad en áreas estratégicas debido al incremento de la violencia.

Esta medida es parte de una serie de esfuerzos para contener la criminalidad y garantizar la seguridad de los ciudadanos en medio de un contexto de creciente violencia en el país.

Las Fuerzas Armadas iniciarán procesos sancionatorios para el personal que permitió que la mujer suba a la tanqueta y acciones legales contra la ciudadana.

El comunicado indica que “en razón que el personal militar ha incumplido con los procedimientos de seguridad establecidos, se iniciaron los procesos administrativos disciplinarios a los integrantes de la patrulla militar que tengan injerencia, a fin de establecer responsabilidades y sanciones. Las Fuerzas Armadas además iniciarán las diligencias legales pertinentes, respecto a las acciones de la ciudadana que protagonizó este hecho”.

El video que se hizo viral muestra a Katherin Queen, una modelo ecuatoriana, que viste un bikini sobre una tanqueta del Ejército. Los usuarios en redes sociales han cuestionado el uso del equipo militar y la respuesta de las autoridades ante la creciente ola de violencia en el país.

Según ‘El Comercio’, los militares involucrados podrían enfrentar sanciones bajo la Ley Orgánica de Personal y Disciplina de las Fuerzas Armadas por llevar a bordo personas no autorizadas, no cumplir con medidas de seguridad, y usar equipos militares en actividades ajenas al servicio. Las sanciones varían desde amonestaciones hasta arresto o separación de la institución.

La mujer involucrada podría ser demandada por escándalo público, tipificado en el Código Orgánico Integral Penal (COIP), y podría recibir una sanción de hasta 50 horas de trabajo comunitario o de uno a cinco días de prisión.

Katherin Queen, la mujer en el centro del escándalo, es conocida por su carrera como modelo. Según Diario Extra, Queen ha participado en diversos eventos y concursos de belleza en el país, y cuenta con una significativa presencia en redes sociales, donde comparte contenido relacionado con su trabajo y vida personal.

A inicios de junio, los pobladores de la ciudad de Manta, en la provincia costera de Manabí a 194 kilómetros de Guayaquil, fueron testigos de un significativo despliegue militar y policial en respuesta a la creciente ola de violencia criminal que aqueja a la urbe.

Las fuerzas del orden arribaron a la ciudad en cumplimiento al Decreto Ejecutivo emitido el 3 de junio por el presidente de Ecuador, Daniel Noboa. Tropas del Ejército y unidades élite de la Policía Nacional comenzaron a patrullar las calles de la ciudad, que ha sido duramente golpeada por la presencia de bandas narcoterroristas.

Violencia en Manta

En el decreto, el presidente Noboa ordenó al Ministerio de Defensa Nacional y al Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas que se establezcan temporalmente en Manta.

Del mismo modo, el Ministerio del Interior y el Comandante General de la Policía Nacional deben coordinar para que la Comandancia General de la Policía y otras dependencias pertinentes también se ubiquen temporalmente en esta ciudad portuaria.

La violencia en Manta ha alcanzado niveles alarmantes lo que provocó que el presidente Noboa disponga el traslado de la cúpula policial y militar a Manabí, una de las siete provincias bajo estado de excepción por la inseguridad.

Según datos de la Policía, recogidos por Primicias, en Manta y Portoviejo se registró el 68 % de las muertes violentas registradas contabilizadas este año. De estas el 94 % corresponde a asesinatos por violencia criminal.