Una ‘bala perdida’ o como las autoridades lo calificaron un ‘daño colateral’ sería la causa de la muerte de Silvia Patricia Molina Grimaldos de 23 años de edad que murió por un proyectil de arma de fuego que le impactó en la cabeza, en la noche de este viernes 5 de abril en el barrio La Joya en Bucaramanga, Santander.
Silvia Patricia era madre de un menor de cinco años de edad, vivía en el barrio Alfonso López, en el centro de la ciudad, y era empleada de una salsamentaria.
De acuerdo con el reporte de la Sijin de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, el ataque sicarial ocurrió a las 8:30 p.m., en la calle 39 con carrera 2 del barrio La Joya en el establecimiento comercial de razón social ‘Kumis’.
Allí se encontraba Silvia y en el local también estaba Óscar Eduardo Alfonso Rodríguez de 29 años de edad, conocido con el alias de ‘Osquitar’. Este hombre consumía bebidas embriagantes. Reside en el mismo barrio, en La Joya, y aseguró ser comerciante.
Además, le figuran tres registros en la Fiscalía como indiciado por los delitos de violencia intrafamiliar en el año 2015; amenazas 2012; y daño en bien ajeno 2012.
A las 8:30 de la noche, por la calle 39 aparecieron dos sujetos en una motocicleta, que tenían el objetivo de atentar contra ‘Osquitar’.
Cuando llegaron frente al negocio, el pasajero de la moto se bajó con un arma de fuego y realizó seis disparos buscando acabar con la vida de Óscar Alfonso.
Dos de los impactos dieron en el ‘objetivo’ del sicario. Alias ‘Osquitar’ recibió las heridas en el tórax posterior derecho y en el brazo derecho.
Una de las balas tomó otro rumbo e impactó en la cabeza a Silvia Patricia, que según testigos, salía del baño.
“Llegan dos sujetos en una motocicleta. El parrillero desciende de la misma, ingresa al establecimiento y dispara en contra de la humanidad de la víctima (Ósquitar) impactándolo en dos ocasiones, como daño colateral de esta acción resulta la hoy occisa Silvia Molina”, confirmó en el informe la Sijin de la Policía Mebuc.
El hombre y la mujer gravemente heridos fueron trasladados por la comunidad hasta el Hospital Universitario de Santander, HUS. Silvia Patricia murió antes de recibir atención médica.
“La femenina por la gravedad de las heridas fallece, mientras el lesionado ingresa a tomografía, queda en observación y en espera de evolución, de manera informal manifiesta no conocer el agresor”, informó la Policía.
Los agresores huyeron con rumbo desconocido, pero el hecho quedó grabado en cámaras de seguridad del establecimiento. Una de las pistas con las que cuentan las autoridades fue entregada por el novio de Silvia Patricia que aseguró que, al ver los videos, uno de los sicarios sería conocido con el alias de ‘´Ángel’.
El CTI de la Fiscalía se encargó del levantamiento del cuerpo en el HUS y el traslado al Instituto de Medicina Legal en el barrio Campo Hermoso donde sus familiares lo reclamarán para el posterior sepelio.