La industria cinematográfica está llena de anticipación por la secuela de “La Pasión de Cristo”, titulada “La Pasión de Cristo: Resurrección”. La primera película, dirigida por Mel Gibson y protagonizada por Jim Caviezel como Jesús, fue un fenómeno de taquilla en 2004, recaudando más de 612 millones de dólares a nivel mundial. A pesar de las controversias que rodearon su enfoque extremadamente realista de la crucifixión de Jesús, la película fue un éxito indiscutible.
Ahora, casi dos décadas después, Gibson y Caviezel se están preparando para la secuela. Aunque la fecha de estreno aún no se ha anunciado, la película está en desarrollo y se centrará en la resurrección de Jesús. La preproducción se mantiene a un ritmo lento, y no hay informes sobre el casting adicional o el inicio del rodaje.
Mientras esperamos más detalles sobre la secuela, es interesante recordar los desafíos y eventos notables que ocurrieron durante la grabación de la primera película. La producción de “La Pasión de Cristo” fue un proceso único y desafiante, lleno de incidentes inusuales y momentos de inspiración.
Jim Caviezel, quien interpretó a Jesús, fue alcanzado por un rayo en dos ocasiones durante el rodaje. A pesar de este evento aterrador, Caviezel continuó con su papel, demostrando un compromiso y una dedicación impresionantes. Además, durante la secuencia de la flagelación, Caviezel fue azotado sin querer varias veces, lo que añadió un nivel de realismo a la escena que muchos encontraron perturbador.
Caviezel también tuvo que soportar sesiones de maquillaje de hasta siete horas para las últimas escenas de la película. Este proceso agotador fue necesario para retratar de manera convincente la crucifixión y muerte de Jesús en la pantalla.
Curiosamente, cuando comenzó el rodaje, Caviezel tenía 33 años, la misma edad que Jesucristo cuando murió. Este detalle, aunque puede parecer una coincidencia, añadió un nivel de autenticidad a la interpretación de Caviezel.
La película fue grabada en la ciudad de Matera, Italia, un lugar conocido por sus antiguas estructuras de piedra que proporcionaron el telón de fondo perfecto para la historia bíblica. Además, para poder rodar algunas escenas particulares, Caviezel tuvo que aprender latín y arameo, los idiomas que se hablaban en la época de Jesús.
En los días previos al estreno de la película, el actor principal acudió por el apoyo del Papa y recibió la bendición correspondiente. Cada día que se realizaba un rodaje, un sacerdote daba una misa en latín para Mel Gibson y todo el elenco. Estos detalles muestran el nivel de compromiso y dedicación que se puso en la producción de la película.
A pesar de los desafíos y las controversias, “La Pasión de Cristo” sigue siendo una de las películas más impactantes y memorables de la historia del cine. Con la secuela en camino, los espectadores de todo el mundo esperan con ansias ver cómo Gibson y Caviezel abordarán la historia de la resurrección de Jesús. Sin duda, será un evento cinematográfico que no querrá perderse.