Luego de las afirmaciones que señalaban como inconclusas las obras del nuevo pabellón de la cárcel Palogordo, en Girón, la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (USPEC) salió a explicar qué sucede realmente con esta infraestructura.
En dichas quejas, se detallaba que “no hay baños, ‘rancho’, ambulancia, alojamientos, e incluso, hay daños en la infraestructura que no son reparables fácilmente. Además, la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, PTAR, tampoco está construida”.
Aunque en su momento las Instituciones responsables no entregaban una contraparte de dicha situación, hoy decidieron desmentirla.
Al respecto, aseguraron que “no es una estructura denominada ‘sin sin’. El Penitenciario posee 321 cámaras de seguridad con tecnología de Sistema Cerrado de cámaras de Transmisión; además, un tanque de reserva con capacidad de 30 mil litros de agua que bombea a cada bloque con un sistema de distribución de gravedad, así como un sistema de cerramiento con 3000 metros de malla de alta seguridad de 358 refuerzos”.
Sobre las falencias en el ‘rancho’ y la PTAR, la USPEC afirmó que todo esto sí está completo. «El rancho -o cocina- construido se entregó con ollas, sartenes, cuartos fríos, hornos, planchas y todo lo requerido para la alimentación óptima indicada para la Población Carcelaria (desayuno, almuerzo, comida y refrigerio nocturno)”.
En cuanto a la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales, tema que preocupaba en el aspecto ambiental, la Unidad precisó que sí cuenta con ella.
“La PTAR está conectada al acueducto de Piedecuesta, y tras análisis físico-químicos, se indica que la calidad del agua residual está en 98% de potabilidad, cumpliendo con los estándares y parámetros establecidos para que la población aledaña no sufra de contaminación en el líquido que llega a sus hogares”.
