Gustavo León Ariza, el ciclista que falleció este domingo 4 de enero en un accidente de tránsito con un tractocamión, hace tan sólo 39 días había logrado sobrevivir a otro siniestro vial en el que su mamá perdió la vida.
Este primer accidente se presentó en el kilómetro 25 de la vía que de Bucaramanga conduce a San Alberto, en el sector de Portachuelo, Rionegro, el pasado 27 de diciembre.
Un bus servicio público, de placas SXR-187 y afiliado a la empresa Lusitania, transportaba a 19 pasajeros, todos ellos integrantes de una misma familia, incluido a Gustavo.
Los León Ariza habían contratado el vehículo para que los trasladara desde el municipio de Girón hasta El Playón, luego de pasar la celebración de Navidad.
Según lo revelado en ese momento por la Policía, antes de llegar a su destino, por una aparente falla en los frenos, el conductor del bus perdió el control y terminó volcado de medio lado.
En total, 18 personas resultaron con algún tipo de lesión y requirieron ser trasladadas de urgencia a centros médicos en El Playón, Rionegro y Bucaramanga.
Ana Silvia Ariza, una adulta mayor y madre de Gustavo, perdió la vida en este hecho. La mujer llegó sin signos vitales al Hospital San Antonio en Rionegro.
La muerte del ciclista
En el mismo corredor vial que conduce de la capital santandereana al departamento del Cesar, se presentó el accidente en el que perdió la vida el ciclista de 50 años.
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Gustavo León Ariza, de 50 años, como solía realizar de manera frecuente, salió desde su vivienda en el casco urbano del municipio de El Playón a realizar deporte en su bicicleta.
De acuerdo con el reporte de las autoridades, en momentos en él iba por el kilómetro 45 + 445, cerca del Sena del municipio en mención, un tractocamión, de placas WON-209, al parecer por adelantar, invadió el carril y se lo llevó por delante.
Según relataron los testigos a la Policía, el ciclista logró ponerse de pie y hablar con el conductor del vehículo de carga para que le arreglara la bicicleta. Después de esto, se desmayó y tuvo que ser trasladado de urgencia hacia el Hospital Santo Domingo Savio de El Playón.
Allí, pese a los esfuerzos, el hombre de 50 años terminó perdiendo la vida producto de un trauma craneoencefálico severo, entre otras lesiones.
“Es duro que esta familia nuevamente tenga que perder a un integrante, porque hace unas semanas hubo murió la madre de Gustavo también en la misma vía. Es muy doloroso y no encontramos ninguna explicación”, di un allegado a la víctima.
El hoy fallecido es recordado por los suyos como un hombre dispuesto a servir a su comunidad y de hogar. Él trabajaba en la empresa Campollo.
El cuerpo del hoy fallecido permanece en la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Bucaramanga.
