Atrapado entre las llantas traseras de dos buses quedó el cuerpo de John Édison González, de 35 años, luego de una situación que se registró en la noche de este jueves 28 de diciembre en el barrio Caribe, en Medellín, que tendría como origen la intolerancia que vincularía a los conductores y ayudantes de estos dos vehículos.
Los hechos se registraron a las 7:30 de la noche en la carrera 65 con la calle 80, luego de que uno de los buses, que prestaba servicio de turismo, estuviera parqueado recogiendo unos pasajeros sobre la carrera 65 para realizar un viaje camino a la Costa Caribe.
De acuerdo con los testigos, detrás de este bus estaba un vehículo de metroplús, que “estaba toque y toque la bocina para que le dieran permiso, lo que empezó a generar un altercado con el conductor del otro bus y su ayudante”.
Después de unos minutos, al parecer, el conductor del bus de transporte masivo habría aventado el vehículo, en medio de la molestia, colisionando contra el automotor de turismo, sin prever que allí se encontraba John Édison montando unas maletas para iniciar el viaje.
Según contaron desde la empresa a la que está adscrita el vehículo de turismo, el conductor del bus de metroplús impactó contra la parte trasera del otro bus y arrastró a este ayudante hasta dejarlo aprisionado contra las llantas de ambos vehículos, la delantera del bus alimentador y la trasera del de turismo.
Después de la alerta de las personas que se encontraban en la zona, el bus alimentador se detuvo y fueron a verificar cómo se encontraba este ayudante. Al prestarle los primeros auxilios, se encontraron con que no tenía signos vitales.
Los agentes de la Policía Judicial de la Secretaría de Movilidad de Medellín realizaron la inspección al cuerpo sin vida de este ayudante de bus, quien no estaba vinculado directamente con la empresa transportadora, según informaron a este medio de comunicación. Allegados manifestaron que a John Édison lo conocían entre los conductores y ayudantes como Bugs Bunny.
Desde el Metro de Medellín, entidad que está a cargo de la operación de los buses de metroplús, señalaron que dejarán la investigación en manos de las autoridades respectivas.
Después de las investigaciones, ya en manos de la Fiscalía, quedará por establecer si este hecho se trató de una muerte por accidente de tránsito, como inicialmente quedó catalogado, o si pasa a ser un homicidio, debido a la alevosía con la que se habría registrado la colisión entre los dos buses.