En una especie de ‘cementerio de carros’ se ha convertido la bahía que está habilitada cerca a los edificios que bordean al barrio Los Pinos, al oriente de la ciudad.
Tal espacio, que en el papel es para estacionar los automotores de los allí residentes, hoy es un parqueadero público gratuito y permanente de carros viejos.
Pese a que la Junta de Acción Comunal del sector ha solicitado al Municipio intervenir la zona, “nada se ha hecho”.
“Cada día que pasa llegan más personas que dejan abandonados sus carros vetustos. Hay automotores que llevan más de dos años allí”, dijo un vecino.
A juicio del vecindario, estos carros deteriorados “se están convirtiendo en un problema de inseguridad y de contaminación; e incluso afectan a la salud”.
“Lo más grave del caso es que hay habitantes de calle que han optado por habilitar en esos vehículos sus improvisados dormitorios. La situación es desesperante y, a decir verdad, será preciso que las autoridades policiales tomen cartas en el asunto, para evitar aquí mayores problemas”, precisó otro vecino del lugar.