Una comunidad que por mucho tiempo se vio inmersa en situaciones violentas y acciones que la hacían calificar como un ‘barrio pesado’. Andrés, luego de salir de un centro de rehabilitación en donde lucho contras antiguas adicciones, tuvo la idea de iniciar un torneo de minifútbol en la cancha de los bambués, un escenario deportivo de tierra que está situado en la mitad de las viviendas. “Yo le dije a Cristian que hiciéramos un torneo de fútbol y él me dijo que sí a la idea de una, pero que debíamos hablar con toda la gente porque yo no quería tener problemas más adelante” manifiesta José Andrés, organizador del torneo Monumental Los Bambués.
Esta idea se empezó a materializar y tuvo lugar por primera vez en el 2020, luego de salir de la pandemia, Andrés y Cristian iniciaron con lo que sería su sueño, construir un ambiente de fútbol en paz en su barrio. Andrés es zapatero de profesión, pero considera este torneo como su emprendimiento. “Esto para mí ha sido un emprendimiento, me ha ayudado a solventar los gastos de mi hogar, de mis dos hijas y no solo me ha beneficiado a mí sino a toda la comunidad, aproximadamente tenemos una alfuencia de 1000 personas, eso ayuda a la economía del sector, las tiendas, los helados, todo” afirma Andrés.
De lunes a sábado realiza su labor como zapatero, en su hora de almuerzo se encarga de realizar las llamadas a los líderes de los equipos para dar a conocer sus programación, asegura que su semana acaba los domingos a altas horas de la noche y en ocasiones de la madrugada.
Cristian actualmente se encuentra en España cumpliendo su sueño de convertirse en director de fútbol profesional, es por eso que Andrés es el encargado de todo lo relacionado a la organización actualmente.
El principal objetivo de realizar este torneo era la de acabar con las limitaciones que los mismo habitantes crean en sus barrios, mitigar un poco la violencia que por años caracterizó al sector y a sus residentes, enseñarle a la comunidad que son más las cosas que los unen que las que los separan, es por eso que el fútbol fue elegido como la pasión para ser el puente de este mensaje.
“Yo quería que los niños cambien su manera de ver el barrio, que ya no pensaran en los problemas que tiene este con el otro, sino que miraran que hay mucho talento dentro de esa comunidad, que pensaran luego ‘a mí me gustaría jugar como este’, dejar de la lado las drogas, violencia, enemistades, todas esas situaciones que lo llevan a uno por el camino equivocado desde muy temprana edad” resalta el organizador.
Este torneo no cuenta con patrocinadores, todo lo que han construido ha sido a pulso de los organizadores y de la comunidad. Al año se realizan seis torneos, con categorías de veteranos, mujeres y libre, en cada uno de ellos Andrés trata de aportarle algo a la cancha, de mejorarla para que las persons vean que es un trabajo social y colectivo.
“Aquí ha venido gente de todas partes, Piedecuesta, Barranca, Florida, eso ha ayudado a muchas personas del barrio, aquí la idea es ayudarnos entre todos, eso es lo que buscamos. Quisieramos que el torneo sea algo mucho más grande y trabajamos porque así sea, llevar este mensaje a todos los lugares que sean posibles” afirma Andrés.