Continúa el oscuro capítulo de violencia en contra de las mujeres en el Magdalena Medio: tres hechos, que dejan a una femenina muerta y dos más heridas, han marcado días sombríos.
La tragedia comenzó con el feminicidio de Sandy Téllez Tuesta en Santa Rosa (Sur de Bolívar), una mujer llena de sueños, cuya vida fue truncada de manera despiadada por el hombre que hace doce años le había prometido amor eterno en el altar, ante los ojos de Dios. Sandy fue atacada con arma de fuego en su propia casa, en medio de una riña y de la furia incontrolable de su esposo.
Familiares cuentan que el pasado viernes, cerca de las 4:00 pm, el esposo de Sandy llegó a su casa después de quince días de trabajo en una mina de oro, llevó algunas cervezas y se sentó a departir con ella en las afueras de la vivienda. Pasadas algunas horas, el hombre, al parecer, le hizo unos reclamos a la mujer y la golpeó.
“Él bajaba de la mina, se embriagaba y le daba mala vida pero ella nunca decía nada. Ese día ese señor, Freddy Angarita, bajó y ellos dos estaban tomando; supuestamente le contaron que ella se la pasaba en la calle y de repente se alocó, la subió y le empezó a pegar”, relató Dany Tuestas, tío de la víctima.
Puertas adentro, se desató la tragedia ante la mirada atónita del hijo mayor de la pareja, quien a sus escasos ocho años, presenció la fuerte golpiza y el posterior ataque a bala en contra de su progenitora. “Él le dio hasta que no pudo más; y después sacó el arma y le dio un tiro en la cabeza, todo lo vio el niño mayor”, contó el familiar.
Ante la algarabía y el llamado de los vecinos, familiares lograron trasladar a la mujer en un taxi hasta el hospital local.
“Ese mismo día la trasladaron a Aguachica y después a Valledupar. Él le metió una bala traumática al revolver, el impacto le inflamó el cerebro”.
Pese a los esfuerzos de los galenos, la vida de Sandy se apagó. Familiares exigen justicia. “Ella era una mujer trabajadora, deja dos niños de 2 y 8 años, pedimos que se haga justicia y la máxima condena. Y aquellas mujeres que sufren de maltrato que por favor hablen, denuncien”, dijo Dany Tuestas.
Según la evaluación de Medicina Legal, además de la herida de arma de fuego, la mujer tenía varios hematomas producto de los golpes y señales de asfixia mecánica.
El presunto agresor fue capturado en su propia casa, mientras la mujer era trasladada a un centro asistencial. Fue puesto a disposición de la Fiscalía por los delitos de feminicidio, porte ilegal de armas de fuego y violencia intrafamiliar. En el procedimiento se le incautó un revólver, con el cual habría disparado.
Un juez de control de garantías, le dictó medida de aseguramiento.
Dos mujeres heridas
Un día antes de la muerte de Sandy, Bertha Alicia Cárdenas Roa, de 18 años, fue atacada a bala, también en el municipio de Santa Rosa.
Según la Policía, el agresor sería su exnovio, un menor de 16 años, quien le habría propinado cuatro disparos en medio de un ataque de celos. “Nos informan que fue su ex-pareja sentimental, quien le ocasionó las heridas, se encontraba en el sector conocido como Candy Flow (zona boscosa) en compañía de un amigo. En ese momento el joven llegó y sin medir palabras le disparó”, reportó de manera preliminar la Policía del Magdalena Medio.
La joven fue trasladada a un centro asistencial de Aguachica, en donde se debate entre la vida y al muerte.
El hecho de violencia más reciente en contra de una mujer, ocurrió en el barrio Villa Plata de Barrancabermeja, en donde Nidia Gómez, fue atacada a tiros por desconocidos.
Según testigos, la mujer llegaba a su vivienda cuando fue abordada por un sujeto que le disparó en dos ocasiones.