Continuó la invasión de los lotes de la escarpa de la calle 45, vía que desde el barrio Campo Hermoso conduce hacia Chimitá.
Hacía 10 días, la Cdmb había intervenido el lugar y con la fuerza pública pudo desalojar a las personas que se encontraban desde hace algún tiempo allí.
Pero no pasó ni un día para que volvieran a situarse en estos predios y generar controversia.
Líderes Campo Hermoso, Quinta Estrella y otros barrios aledaños están preocupados porque las autoridades aún no hacen nada. Esos terrenos los deterioraron.
“De nuevo se ven los invasores y ahora llegan por grupos a tratar de apoderarse de estas hectáreas que viene desde Chimitá hasta en el sector de Quinta Estrella”.
“Lo más increíble es que están tratado de vender predios entre $100 y $500 mil, donde han incendiado y talado la zona, para tratar de hacer los loteos que son áreas protegidas y recursos del municipio”, manifestó Orlando Pulido, ciudadano del sector.
Más denuncias
Con drones, el Concejal Jaime Andrés Beltrán pudo corroborar las denuncias de la comunidad y en sus redes sociales dejar en evidencia los daños ambientales.
“Para cercar 300 lotes y levantar 200 cambuches se requirieron semanas. ¿No hubiésemos podido intervenir antes y evitar tremendo daño ambiental?”, colocó en Twitter.
En las imágenes se puede evidenciar que son cerca de 500 metros los terrenos que fueron quemados, para luego instalar cambuches, y así comenzar a dividir cada lote.
“Estas conflagraciones están al borde de la carretera, la Policía llega al lugar, hace el desalojo, pero en cuestión de minutos vuelven a la zona. Hay que tomar medidas urgentes, no sólo por el tema ambiental, sino el riesgo social de las familias que están viviendo allí, porque es escarpa y de alto riesgo”.
“Hay más de 200 familias apoderadas en el lugar y lo que nos preocupa es que hay personas vendiendo espacios para que se puedan instalar en el sitio, parcelas a bajos precios para poder construir”, manifestó el concejal.
El corporado dijo que los invasores de lotes en Bucaramanga aprovecharon las protestas para tratar de invadir, talar y quemar la zona, para luego vender los espacios.