La emergencia se registró en la mañana del miércoles 31 de mayo, tras un desbordamiento en la laguna El Molino, entre los municipios de Villa Caro y Ábrego.
La avalancha afectó, además de la vía principal que comunica a Ocaña con Cúcuta, varias veredas.
La Gobernación de Norte de Santander activó un Puesto de Mando Unificado para atender a los damnificados y revisar las afectaciones viales.
Funcionarios del Instituto Nacional de Vías, Invías, hicieron presencia en la zona tras la avenida torrencial que generó el desbordamiento del río Tarra entre el km 47 y el km 52 de la vía, sector Ábrego, y que derivó en el cierre total del corredor.
Tras el recorrido se establecieron tres puntos críticos en la zona, el kilómetro 47 + 500 al km 48, donde la vía está afectada en 500 ml y en donde se presume la afectación de un puente de 14 ml., el kilómetro 49, donde hay 300 ml afectados por la gran cantidad de lodo que cayó sobre la vía y en donde también se presume la afectación de un puente de 11 ml, y el kilómetro 51 a km 52 (1.000 metros lineales) que es el lugar que tras la inspección ocular es el de mayores inconvenientes ya que además del alud de tierra, allí también se presume sufrió afectaciones un puente de 60 ml.