Sobre las 3:00 de la tarde del pasado martes, 30 de mayo, siete agentes especializados del CTI de la Fiscalía llegaron hasta la Casa de Nariño para realizar una inédita inspección y recolectar material probatorio en medio del caso de la jefa de Gabinete, Laura Sarabia, a quien se le habría perdido un maletín con $35 millones en su apartamento, y quien habría accedido para que la exniñera de su hijo, Marelbys Meza, se sometiera a prueba de polígrafo.
La inspección, que incluso fue confirmada por el mismo presidente Gustavo Petro en horas de la mañana y la cual calificó como un «allanamiento», se produjo por decisión de un fiscal de la Dirección Especializada contra la Violencia de los Derechos Humanos.
Tras recorrer los sótanos y las diferentes áreas, los agentes especializados obtuvieron los protocolos necesarios para el uso del polígrafo oficial de la Casa de Nariño, el cual es utilizado únicamente para los altos funcionarios como una medida de seguridad.
Y es que según denunció Marelbys Meza, cuando fue llevada por Guardia Presidencial al sótano no se sometió a ningún filtro de seguridad ni de registro, hecho que habría llamado la atención de la Fiscalía General de la Nación.
Los peritos también lograron acceder y extraer los videos de las cámaras de seguridad del Edificio Galán y los libros de registro de entrada a la zona y recopilaron las actas de los miembros de los esquemas de seguridad que para el mes de enero trabajaban con Palacio de Gobierno.
El caso Sarabia
El escándalo fue denunciado por Marelbys Meza, de 51 años de edad, quien en Revista Semana contó que a finales del mes de enero, un maletín con $35 millones se desapareció del apartamento privado de la jefa de Gabinete, Laura Sarabia, para quien ella trabajaba en ese momento.
Tras este hecho, la mujer habría sido llevada bajo presiones a la Casa de Nariño para ser sometida a la prueba de polígrafo pese a que la Fiscalía General de la Nación no tenía conocimiento de estos procedimientos, según confirmó Francisco Barbosa.
Durante al menos cuatro horas, dice Meza, la habrían incomunicado en los sótanos donde la presionaron para que contara en dónde estaba el dinero que le acusaban, había hurtado del apartamento de la alta funcionaria del Gobierno Nacional.
Tras este polémico hecho, tanto la Fiscalía General de la Nación como la Procuraduría abrieron las investigaciones e indagaciones para determinar personas y hechos relacionados con este caso. «Que investiguen todo lo que quieran», dijo Petro.
