La tarde de este lunes festivo las autoridades de Madrid (Cundinamarca), informaron a la opinión pública que en una vivienda del municipio, pasadas las 2 de la tarde, fue hallado el cadáver de una joven de unos 19 años. En la propiedad se encontraba un hombre que tenía una herida causada con arma blanca y quien fue trasladado a un centro médico.
No obstante, posteriormente fue capturado por ser el principal sospechoso del episodio de muerte. Las autoridades manejan dos hipótesis.
Hallazgo
A las 2:30 de la tarde de este lunes, uniformados locales recibieron una alerta que daba cuenta de que en una vivienda del barrio El Nogal había una persona herida con arma blanca. Minutos después, los uniformados llegaron hasta la Carrera 3A con Calle 15 y se encontraron con un hombre de 23 años que tenía una herida menor causada con arma blanca. Acto seguido, el hombre le advirtió a la Policía que en el segundo piso de la casa, en una habitación, había una mujer inconsciente.
Los uniformados subieron de inmediato y se encontraron con una joven que yacía desnuda en el piso de la habitación, en la escena no había sangre y el cuerpo no tenía heridas visibles. Cuando le tomaron signos vitales, confirmaron lo evidente: la joven ya se encontraba muerta.
En el momento en que los investigadores realizaron la inspección del cuerpo, la joven fue identificada como Yurani Andrea Sanabria, de aproximadamente de 19 años. Su cuerpo tenía signos de asfixia.
¿Qué pasó?
Fuentes del municipio le confirmaron a Q’HUBO que la investigación se desarrolla a partir de dos hipótesis: “Al parecer la víctima fue contactada por el agresor hoy capturado para un tema de carácter erótico y cuando llegó el momento del pago, se formó una riña por desacuerdos originados por la tarifa que previamente habían previsto, el hombre se habría negado a pagar lo acordado y finalmente la habría asesinado”, nos contó ayer una fuente policial que conoció el caso.
La otra hipótesis sostiene que todo se habría tratado de un accidente: “Al parecer en medio de un encuentro sexual que sostenían ellos dos, con una cuerda de felpa usada para ciertas prácticas, el hoy capturado la habría asfixiado.
El peritaje que se presentó en la audiencia de legalización de captura sostiene que la víctima fue atacada mientras estaba de espaldas a su agresor, hecho que desvirtúa un posible ataque en defensa propia por parte del sujeto”, nos contó ayer una fuente que se encontraba en la audiencia de legalización de captura.
El capturado tenía una herida en la muñeca izquierda que se habría causado él mismo para justificar su conducta como un supuesto acto de defensa propia.
Durante dicha audiencia se determinó que la captura fue legal y después de la exposición de las labores de peritaje que se realizaron con el cuerpo, ante la evidencia. El victimario de 23 años fue imputado por el delito de homicidio.
Aunque las versiones se contradicen y hasta ahora no hay una versión exacta de lo sucedido, lo cierto es que este nuevo homicidio se enmarca dentro de las Violencias Basadas en Género cuyas cifras aumentan escandalosamente a diario sin que parezca haber un tatequieto efectivo.