En abril de 2019 se reabrió el Teatro Santander en Bucaramanga, luego de la inversión de 40 mil millones de pesos en su restauración.
La noticia alegró a bumangueses que en su niñez visitaron este teatro y a las nuevas generaciones que entraban por primera vez a este imponente edificio.
Sin embargo, en la Carrera 12 con Calle 41, a solo 14 cuadras de distancia, otra gran fuente de historia y cultura se desmorona.
El Teatro Coliseo Peralta fue fundado en 1893 por Anselmo Peralta, un hombre amante de las artes escénicas que decidió convertir su casa en un corral de comedia española, donde en el siglo XIX la burguesía se ubicaba en los balcones del segundo piso y la ‘gente del común’ ocupaba la parte de abajo.
Junto a Jaime Lizarazo, quien ha sido una de las personas encargadas de cuidar el lugar en los últimos siete años, Vanguardia recorrió la infraestructura que en la actualidad sobrevive pese a las fallas en la estructura, en los techos de la casa, en la cocina y en los baños.
“Uno pasa por acá y ve el teatro arreglado porque junto a grupos de teatro y la Corporación (Corporación de Teatro Jaulabierta) lo hemos sostenido, arreglado o pintado. Pero creemos que la obligación del estado colombiano y del gobierno municipal es comprarlo y convertirlo en un teatro hermoso”, afirmó Lizarazo Bautista.
El segundo piso ya no se puede utilizar, pues debido al deterioro de las estructuras de la casa, el piso de esos balcones está inclinado hacia el primer piso. No aguantaría el peso del público.
Los techos de la cocina, los baños y el escenario principal están sostenidos por cortes de madera y por escaleras también de este mismo material.
¿Qué le falta al Teatro?
El Teatro actualmente pertenece al Club Kiwanis de Bucaramanga, pero según las declaraciones de Jaime Lizarazo, el club no tiene el dinero para la restauración.
La restauración del Teatro puede llegar a costar unos 12 mil millones de pesos para dejarlo nuevo. Es lo que más o menos costaría. Le faltan muchas cosas para volverlo a inaugurar como la primera vez”.
Además, el años pasado, entre mayo y junio, colapsó un muro de uno de los edificios vecinos y dañó aún más la estructura del teatro.
“Al lado del Peralta está ubicada una escuela de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. Ese día una de sus paredes sufrió un colapso y eso afectó parte de la estructura del edificio. Hasta el momento no han arreglado el daño”, explicó Lizarazo.
*Publicado originalmente en mayo 2019.