Lo que comenzó con el compartir un rato ameno con un amigo al que no veía desde hace tiempo, terminó mal para un joven den Bucaramanga tras ser víctima, posiblemente, de la escopolamina u otra sustancia que lo doblegó.
El pasado jueves en la noche, la víctima llegó hasta un bar en el barrio Cabecera de la Ciudad Bonita. Pasada la medianoche salieron y se desplazaron hasta la casa del amigo donde la víctima tomó un carro desde una plataforma para que lo llevara a su casa en el Centro de Bucaramanga.
De ahí en adelante es poco lo que recuerda.
En medio de imágenes ‘vagas’ recuerda que el conductor se bajó a comprar algunas cervezas en un Oxxo, y se subió de nuevo al carro.
“Cuando el conductor se baja y vuelve yo perdí como la noción del sentido como tal. Empezamos a dar varias vueltas en el carro. Según lo que se ha podido determinar hicieron retiros desde mi cuenta en un cajero de Bancolombia en San Francisco y en el Paseo del Comercio. Otro dinero fue enviado por transferencias y otro desde mi cuenta a Nequi. Es de resaltar que yo en ese momento probablemente no tenía ninguna forma de evitar decirle por ejemplo mi clave o de darle mi teléfono”.
Cuando la víctima volvió un poco en sí, pasadas las 9:00 de la mañana del viernes, ya estaba en un parque en el sur. “Tomé consciencia en un parque que no sé muy bien si era en Floridablanca o en el sur de Bucaramanga. Como pude agarré un taxi para irme a la casa pero terminé en el lugar en el que trabajo”.
Fue hasta las 4:00 de la tarde cuando por fin empezó a atar cabos. “Aún a esa hora me sentí muy mal, como hasta el día siguiente (sábado) fue que pudo comer mejor”.
Desde entonces ha estado con poco apetito, somnoliento y con otros síntomas.
Ante esto acudió al médico y fue sometido a un examen toxicológico. Ahora está a la espera de los resultados para saber qué tipo de sustancia pudieron haberle suministrado.
“No recuerdo muy bien cómo era el conductor; recuerdo que no paraba de hablar y en cierto punto recuerdo que me suministraba algo pero yo en ese momento no coordinaba nada, estaba como en un estado de indefensión. Estaba en un estado en el que no podía luchar en contra”.
Por ahora, se espera que se lleve a cabo una investigación para determinar lo ocurrido. El recorrido del carro en la plataforma, las cámaras de los cajeros podrían ser pieza clave. El celular que usó para pedir el vehículo también fue robado. Le sacaron cerca de un millón 600 mil pesos de su cuenta.