La queja fue instaurada por la administradora de la estación de servicio Bolívar, Esmeralda Marín, quien denunció que “durante la noche del pasado viernes, 20 de enero, cuando el sitio se encontraba lleno, cerca de 20 motos rodearon las islas en las que se administra la gasolina y comenzaron a pintar grafitis”.
Marín Díaz afirmó que “en los mensajes de los grafitis insultaban a un directivo del Bucaramanga y le escribieron “Fuera Álvarez”. Muchos de los ocupantes de las motos estaban encapuchados y algunos tenían las camisetas del equipo de fútbol del Atlético Bucaramanga”.
La administradora del sitio dijo que “una de las personas traía una especie de antorcha con la que pretendía prender una mecha y quemar la estación de servicio. Conductores, jugadores y otras personas huyeron por miedo a que se produjera un incendio. Por fortuna, la mecha no les prendió y se evitó una tragedia”.
La mujer agregó que tanto el islero como el vigilante del lugar fueron amenazados y tuvieron que salir del sitio.
Esmeralda Marín indicó que desconoce las razones por las que estas personas vandalizaron el lugar.“Yo con el Atlético Bucaramanga no tengo nada que ver, ni siquiera me gusta el fútbol. Esta estación de servicio no tiene nada que ver con el equipo ni con sus directivos y mucho menos con las decisiones que ellos toman”, detalló.
De acuerdo con el reporte, tras el ataque las ventas en el lugar han caído por temor de los clientes a un nuevo ataque.