El sueño de Edwin Leonardo Sánchez Silva, un joven de 20 años, era convertirse en un soldado ejemplar por su hijo de dos años. Pero en una maniobra imprudente, en la vía entre Rionegro y El Playón, perdió la vida al ser arrollado por un camión.
El padrastro del militar, don Hernán Duarte Caballero, un hombre de 67 años profesor de la vereda La Pradera de Rionegro, relató que estaba a cargo de Edwin desde los seis años, cuando la mamá que era su pareja sentimental, falleció de manera natural.
Desde hace siete meses fue incorporado como soldado profesional en Saravena, Arauca, en el Batallón de Instrucción Táctica, Entrenamiento y Reentrenamiento del Ejército.
“Después del juramento de bandera le habían dado casi un mes de permiso. Estaba viviendo conmigo en la vereda y ahí pasamos las fiestas de diciembre y año nuevo. Tiene un niño de dos años que vive con la mamá en Piedecuesta y era su adoración”, relató don Hernán.
El pasado martes 3 de enero, le pidió el favor a su hijo que llevara a una vecina, de la vereda hacia Rionegro, ya que tenía una cita médica. Edwin le pidió prestada la moto a su padre, una Yamaha negra de placas DPR 05C, para hacer la diligencia.
En el viaje de ida no hubo inconvenientes y la mujer fue dejada en el casco urbano. Cuando ya regresaba solo en la moto, se presentó el siniestro vial que le cobró la vida.
Según testigos, en el sector conocido como ‘La Virgen’, en el ingreso al corregimiento Santa Cruz de La Colina, intentó adelantar a un camión de estacas, de placas R36110, pero en el otro sentido venía otro vehículo por lo que redujo la velocidad de la motocicleta, perdiendo el control y cayendo en las llantas traseras del vehículo de carga.
El conductor del camión no se percató del hecho y fue otro motociclista el que lo detuvo metros adelante. El cuerpo de Edwin quedó sobre el asfalto muriendo de manera inmediata.
En el batallón de Saravena, en Arauca, también sus compañeros del segundo contingente de 2022 lamentaron la muerte. Lo recuerdan como un soldado con sueños de seguir adelante la carrera militar pensando en el bienestar de su hijo.
“Era un excelente ‘lanza’. Uno de soldado siempre piensa que solo va a morir en el monte, pero así es la vida”, comentó uno de sus compañeros del cantón militar.