La empresaria y modelo colombiana, Daniela Ospina, ha revelado recientemente los detalles detrás de su separación con el futbolista James Rodríguez. La pareja, que se casó en 2010, anunció su separación en 2017.
“Me casé a los 18 años y fue un cambio muy radical en mi vida, además de mudarme a otro país (…) Casarse a los 18 años es un gran desafío. No puedo decir si me fue bien o mal, porque cada uno tiene su propia perspectiva. Fue mágico y hermoso, una decisión hermosa, pero después del matrimonio vienen muchas cosas, la madurez y experiencias que aún faltan por vivir”, dijo.
Ospina atribuyó la separación a “malas decisiones” y a situaciones difíciles que la pareja enfrentó al mudarse a España. Según ella, en lugar de enfrentar estos desafíos juntos, cada uno intentó resolverlos por su cuenta.
“No puedo decir que me fue mal porque tengo a mi hija, mi pequeña siempre está conmigo, así que no puedo decir que fue un mal matrimonio o que me fue mal”, agregó.
“Fue una ola de malos comentarios. Eh, no sé, que si parecía un travesti, que si no sé qué y no lo sabes manejar. Porque de repente la vida te cambia y te cambia para positivo, pero tienes que cargar con muchas cosas que mentalmente no era lo que yo esperaba”, confesó Daniela, originaria de Antioquia.
Además, Ospina compartió que tuvo que atravesar esa etapa de su vida en soledad: “Fue un periodo muy duro para mí, lo viví en silencio y me sentí muy sola”. Sobre su separación con el futbolista, Ospina confesó: “Creo que se debió a decisiones erróneas. Cuando una familia o una pareja no está fuertemente unida, las cosas se complican, ya que cada uno termina buscando cómo sobrevivir por su cuenta. Creo que eso fue lo que sucedió; cada uno tomó su propio camino y quizás en algún momento ambos nos sentimos solos”.
Además, durante la entrevista, la empresaria habló de su relación actual con James Rodríguez. Afirmó que son “muy amigos” y que mantienen un contacto constante debido a las responsabilidades compartidas por su hija Salomé, fruto de su matrimonio de siete años. Daniela destacó que, a pesar de la terminación de su relación amorosa, conservan una relación cordial y que solo quedan “cosas buenas” de su tiempo juntos, ya que crecieron como individuos y padres.
“Debido al amor que sentimos por nuestra hija, logramos mantener una muy buena amistad en ese momento, y aún lo hacemos. Fue una decisión muy madura, tomada pensando en el bienestar de nuestra hija y de nosotros mismos; él tenía 26 años y yo 25”, agregó.
Ospina también compartió que, a pesar de que la separación fue una decisión madura tomada “en medio de tanta inmadurez, fue la mejor decisión”. Concluyó diciendo: “Nuestra relación siempre fue hermosa, siempre fue muy amigable, como una relación llena de risas y amistad, como una relación de ‘parceros’. Parecía un juego de niños, cuando tuvimos que tomar la decisión de separarnos, lo único en lo que pensamos fue en nuestra hija. Además, queda el agradecimiento por lo que habíamos logrado juntos”.