Los estudios, básicamente, compararon el comportamiento y el desarrollo de varias mujeres que practicaban la monogamia, frente a algunas especies de mamíferos que prefieren la poligamia y de aldea africanas que hacían lo mismo.
“Descubrimos que una pareja monógama, tenía más hijos cuando duraban mucho tiempo compartiendo juntos. Sin embargo, logramos identificar que las personas que ejercen la poligamia tienden a tener menos hijos, e inclusive a no tener, por el respeto hacia los demás”, señalaron los investigadores.
Además, descubrieron que las féminas se sentían más queridas y apetecidas sexualmente cuando tenían dos o más hombres en su vida.
Por su parte, los hombres e esforzarían más en mantener satisfechas a sus mujeres y se empeñarían en mantener un lugar especial entre la competencia masculina.
Cabe resaltar que artículo científico fue titulado “Desentrañando el éxito de apareamiento y probando los principios de Bateman en una población humana”, el cual fue realizado con una tribu étnica africana, en la cual, por más de dos años analizaron sus comportamientos.