Un fatal encuentro dentro de un taxi con su homicida sería la última escena que vería Diego Armando Rueda Jerez antes de morir a bala el viernes cerca de las ocho de la noche.
El violento ataque sucedió en la carrera 29 con calle 93 del sur de Bucaramanga a la altura del barrio Portofino, dentro de un taxi con placas XVU 802.
La víctima, de 27 años, al parecer tomó el servicio de taxi solo, y se dirigió a lo que sería el último lugar que visitaría en vida.
Una vez llegó, le explicó al conductor que iban a recoger a un hombre, y una vez llegó, le pidió al taxista que si podía bajarse del vehículo unos minutos mientras tenía una conversación ‘privada’ con quien resultaría ser su asesino.
Unos segundos después de que se bajó el taxista, dentro del vehículo se escucharon varios impactos de bala, el hombre que había recogido Diego salió del automotor y caminó unos metros hasta llegar a una motocicleta donde un hombre que lo esperaba para emprender la huida hacia el barrio La Pedregosa.
De inmediato la misma comunidad alertó a las autoridades.
Las pistas detrás del homicidio
A los minutos del hecho de sangre, patrullas de la Policía junto con unidades del CTI de la Fiscalía arribaron al lugar y aunque intentaron auxiliar a la víctima rápidamente a un centro asistencial, Diego Rueda había recibido muchos impactos de bala por lo que cuando llegaron observaron que ya estaba muerto.
Los investigadores entrevistaron al taxista y a varios testigos del hecho para tener algún rastro que permitiera conocer los móviles de su asesinato. Por ahora, se presume que se trataría de un ajuste de cuentas, especialmente por los antecedentes judiciales que tenía la víctima.
Diego había sido procesado en años anteriores por tráfico, fabricación, tenencia o porte de estupefacuentes; receptación y lesiones personales.
Varios curiosos arribaron a la escena y con sus celulares grabaron el procedimiento policial. Se espera que en las próximas semanas, debido a la evidencia recopilada, pueda identificarse plenamente a su homicida para darle captura y judicializarlo.