Quince días después del accidente vehicular protagonizado por Mauricio Larrota Castillo, contratista del Instituto Municipal de Cultura de Bucaramanga, Imcut, las víctimas del choque siguen exigiendo justicia.
Cabe recordar que, en aparente estado de embriaguez, Larrota arrolló a Marley Ardila y a su sobrina, una menor de edad, el pasado 9 de septiembre, momentos después de haber departido en el Megaconcierto promocionado por la Alcaldía municipal y que se extendió por más de 11 horas.
En sesión informal en el Concejo de la ciudad, la madre de la menor de edad accidentada, advirtió que a la fecha ni ella ni su pequeña hija han recibido algún tipo de ayuda, ni del alcalde, Juan Carlos Cárdenas, ni mucho menos por parte de Larrotta Castillo, autor del accidente.
“La niña tuvo una cirugía la cual a mí me duele mucho. Su piernita está con tornillos, ya el Soat llegó al tope de su cobertura por lo que la niña ya está en la casa, ahora estoy en los trámites para que la EPS que yo tengo la siga atendiendo. Me duele que el señor Alcalde diga cosas que nunca ha hecho. Comunica que nos está haciendo seguimiento, pero nunca se ha comunicado conmigo, tampoco asistió a la clínica.
Yo quiero que este caso no se quede impune. Que se haga justicia”, señaló con voz quebrantada.
A su turno, Wendi Parra, hermana de Marley Ardila, la otra víctima del accidente de tránsito, advirtió que en reiteradas ocasiones se le ha negado atención médica a su familiar, por lo que pidió ayuda de las autoridades locales.
“Estamos acá para pedir ayuda y apoyo de ustedes. Que por favor se haga justicia en este proceso, hasta donde se tenga que llegar con transparencia y que por favor nos ayuden con asistencia médica ya que a la niña le hacen falta más procedimientos y a mí hermana no la han querido atender”, denunció Wendi Parra.
En libertad y sin responder
Así mismo, la mamá de la menor accidentada denunció que las autoridades no le practicaron las pruebas de alcoholemia a Larrotta Castillo, sino 36 horas después del siniestro, razón por la cual el coordinador de comunicaciones del Instituto de Cultura, continúa disfrutando de su libertad.
“El señor no se dejó hacer la prueba de alcoholemia sino hasta el otro día en la noche, después de la audiencia. Él está libre. No se ha comunicado conmigo, no sé nada de ese señor. Soy madre soltera con tres hijos y no he podido salir a trabajar por los trámites de la niña. Gracias a Dios he tenido ayuda de la gente que nos ha colaborado y con eso pues ahorita yo estoy sobreviviendo”, agregó la señora.
Con contrato vigente
Aunque el mismo día del fatídico accidente el alcalde Juan Carlos Cárdenas anunció a través de Twitter que pediría la terminación unilateral del contrato de Mauricio Larrotta con el Instituto Municipal de Cultura, a la fecha, el controvertido funcionario continúa vinculado contractualmente con el municipio.
Luis Carlos Silva, director del Imcut afirmó que hoy quedará liquidado el contrato entre Larrotta y el Instituto.
“Estamos en el debido proceso. Ya se habló con él, estamos en el proceso de cancelación del contrato de manera bilateral donde él asume el error que cometió y nos pasa una carta diciendo que va a dar por terminado el contrato por situación personal, obviamente esa es una directriz y ya estamos surtiendo el proceso para la terminación.
“Él tiene que pagar estampillas, seguridad social y presentar un informe. Si hoy, (ayer) no se finiquita ese tema, mañana (hoy), se estará liquidando el contrato de Mauricio Larrotta”, explicó Luis Carlos Silva.
En el Sistema Electrónico de Contratación Pública, Secop, Mauricio Larrotta renovó su contrato como coordinador de comunicaciones del Imcut el pasado mes de agosto, por $23 millones para ser ejecutado en cuatro meses, es decir, 5 millones 750 mil pesos mensuales.
Los concejales de la ciudad criticaron la falta de acompañamiento por parte de la administración con las víctimas del contratista del Imcut y pidieron acciones reales en el corto plazo.
