Un chaleco antibalas, un escolta y un celular; hacían parte del esquema de protección que hasta el pasado jueves tenía Simona Vásquez, una mujer líder de las víctimas del conflicto armado en Barrancabermeja, quien ha sido blanco de constantes amenazas e intimidaciones.
La mujer, en medio de la preocupación, denunció que de manera repentina y sin explicaciones, la Unidad Nacional de Protección, UNP, le retiró el esquema de seguridad que le había sido asignado para ayudar a salvaguardar su vida.
“La UNP me levanta el esquema de seguridad; que me habían otorgado por amenazas y ocasiones que pasaron, parece precipitada la decisión de la UNP, viendo la situación que estamos viviendo en Barrancabermeja, que están recibiendo amenazas y a otros les ha tocado salir del territorio”, dijo.
Con la decisión, la lideresa asegura haber quedado a la deriva y expuesta a que en cualquier momento las amenazas de muerte que ha recibido se hagan realidad, “mi vida queda en riesgos y si me llega a pasar algo, ellos tendrían responsabilidad. Yo hago un trabajo con la comunidad, quiero seguir en esa labor y ahora quedo a la deriva. Lo poquito que tenía, porque no era un esquema completo, me lo retiraron, es muy triste vernos obligados a hacer nuestro trabajo encerrados”.
Así mismo, insiste en que en los últimos meses ha sido objeto de vigilancia por parte de sujetos extraños y, además, que constantemente recibe intimidaciones y persecuciones, “yo tengo muchas denuncias en la Fiscalía y no dan información, yo hago un trabajo con la comunidad, vivo en la comuna siete y para nadie es un secreto el problema que hay en esa zona con el tema de drogadicción que yo he venido denunciando también”, dijo.
Simona Vásquez fue coordinadora de la Mesa de Víctimas durante siete años, en la actualidad desarrolla procesos en la defensa de los derechos de la población víctima del conflicto armado y hace parte de la Mesa de Mujer y Violencia Sexual en la ciudad de Bucaramanga.