Todo por una cadena, que no era de oro
El sábado, hacia las 6:15 de la tarde, el hombre de 62 años se encontraba departiendo con su familia en un andén, en la entrada al barrio Caminos de San Silvestre. Llevaban un buen rato compartiendo y bebiendo alcohol en el andén. Dos sujetos que quizá ya estaban al acecho, se acercaron al grupo pero fueron directamente a robar al docente. Lo despojaron de una cadena que llevaba puesta y emprendieron la huida.
“No es de oro” se atrevió a gritarles Pulgarín a los maleantes, de acuerdo a los testimonios de los testigos. Al escuchar esas palabras, uno de los ladrones se regresó y sin clemencia alguna, le disparó justo en el cuello.
La letal herida le causó la muerte de manera inmediata al profesor. Mientras sus familiares corrieron a tratar de auxiliarlo, los asesinos se escabulleron y escaparon a bordo de una motocicleta. Llevaban el casco puesto, no hubo manera de identificarlos, pero algunas cámaras de seguridad captaron su huida.
Luto en Barrancabermeja
Barrancabermeja se sacudió con el atroz crimen. El valor de una vida se reduce a nada para los bandidos indolentes que desatan el horror por unos cuantos pesos. Los estudiantes del colegio Diego Hernández de Gallegos, donde Jorge Pulgarín enseñaba álgebra, lamentaron la pérdida del ‘profe Pulga’, como le decían de cariño. Lo recordaron como un docente lleno de empatía, buen humor, pero también crítico de las injusticias.
Colegas y allegados admiraban su vocación educativa y su amor incondicional a su familia. Dejó a su esposa, sus tres hijos y dos nietos que eran su adoración.
“Papi tenía muchos planes con usted, muchos sueños por cumplir a su lado, papá porque me le quitaron la vida así”, expresó uno de los hijos del profesor.
