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Se conocen más detalles del crimen de Nickol Rodríguez en el Mesón de Los Búcaros

El sujeto habría trabajado cuidando los carros de un almacén de cadena ubicado en el Mesón de Los Búcaros por lo que conocía muy bien la zona. También se supo que un familiar suyo lo ayudó a ocultar al celular.

Durante todo el día, investigadores de la Sijín, quienes tendrían identificado al criminal -se presume de origen extranjero-, realizaron con la Fiscalía una serie de allanamientos en el asentamiento humano Nueva Jerusalén, en el norte de Bucaramanga, donde el sospechoso residía con un hermano y su mamá.

Relatos hechos a las autoridades por algunos allegados del sujeto, indican que habría llegado agitado a su casa al caer la tarde diciendo que “jodí a alguien, me tengo que ir”.

Ayer en la mañana cuando se preveía el regreso a clases de los estudiantes de La Normal, la noticia sobre la muerte de la adolescente desató una protesta que provocó el colapso en los alrededores del sitio donde fue atacada.

Anoche, el general Samuel Bernal Rojas, comandante de la Mebuc, convocó una rueda de prensa urgente para dar la noticia.

El asesino habría sido arrestado en un parque de Barrancabermeja, hacia donde habría huido a sabiendas de que toda la Policía iba detrás de él.

Interceptaciones hechas por los investigadores indicaban que el supuesto homicida habría llamado varias veces al Puerto Petrolero, al parecer, a una novia.

Hacia las 7:40 p.m. de este viernes el General Bernal anunciaba la aprehensión del foráneo, a tiempo que el Alcalde lo lanzaba por redes.

En la rueda prensa, el general Bernal Rojas confirmó que el señalado asesino “fue ubicado e identificado en Barrancabermeja”, aunque se abstuvo de revelar su nombre y dar mayores detalles, con el fin de no entorpecer la investigación.

No pudieron salvarle la vida a Nickol Valentina

La ciudad estaba en vilo la noche del jueves, trastornada por el atroz ataque del que fue víctima Nickol Valentina Rodríguez. Los padres y el abuelo de la adolescente permanecían desconsolados en la sala de espera del Hospital Universitario de Santander, HUS. Aguardaban a que uno de los médicos saliera de la sala de cirugía y les diera una noticia alentadora.

Nickol fue intervenida quirúrgicamente, pero su estado seguía crítico y no tuvo mejoría. A las 12:05 de la medianoche confirmaron su muerte.

Cientos de personas, entre ellas estudiantes y padres de familia, llegaron al deprimido de Los Búcaros y permanecieron por más de seis horas en un plantón sobre la carrera 27 con Avenida Quebradaseca, sin contemplar siquiera que Nickol fallecería.

Nadie quería perder la esperanza de que aquella joven inocente y llena de vida sobreviviera, que pudiera luchar por su sueños. La noticia de su muerte estremeció a Bucaramanga y al país entero.

“Sus papás despertaron y no la vieron en su cama. Sus compañeros llegaron a clases y no la vieron en su puesto. Eso nos duele a todos, es devastador”, gritaba con la voz entrecortada una de las jóvenes del Programa de Formación Complementaria de la Normal.

A su voz se unió a la de cientos de personas que llegaron al deprimido de Los Búcaros y permanecieron por más de seis horas en un plantón sobre la carrera 27 con Avenida Quebradaseca.

“Le pudo pasar a cualquiera”

Cuando llegó el Coronel Óscar Jaramillo, Subcomandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, para dar declaraciones y escuchar las súplicas de la comunidad, Luz Dary, mamá de dos estudiantes de la Normal, tomó la vocería.

“Hasta las 7:00 a.m. prendieron las luces, ¿Por qué ahora sí están todos presentes? Ahora si tenemos a toda la Policía junta. Ayúdenos, por favor escúchennos. Entendemos el trabajo que tienen, que es delicado y peligroso. El dolor es muy grande, les pedimos de manera respetuosa que nos ayuden”, dijo afligida.

Velatón por Nickol

Mientras, decenas de personas se agolparon en el intercambiador para expresar su sentir sobre el aberrante caso; otras, en un silencio conmovedor bajaron al túnel con velas, flores, globos y carteles. Aquel espacio sombrío, lúgubre, se iluminó con un mensaje suplicante :Justicia para Nickol!.

¡Nickol quería saltar!

Nickol era una adolescente llena de sueños y talentos.

Llevaba cinco años practicando gimnasia artística. Una disciplina a la que le ponía pasión.

Hacía parte del club deportivo Gymnastic’s Way en Bucaramanga. Su práctica en el instituto dejó ‘pasos’ inolvidables. “Ella asistía cuatro días a la semana. Entrenaba en las tardes, pero debido al colegio y al grado que entraba a cursar, tuvo que suspenderlo. Se destacaba en la viga del equilibrio, salto al caballete y barras asimétricas. Participó con nosotros en muchos campeonatos y obtuvo varias medallas”, contó el docente del club depotivo.

“Ella estuvo en porrismo. Le gustaba el baile, era muy sonriente. No compartí mucho con ella pero siempre la veíamos por ahí”, contó una alumna de la Normal.

Los compañeros de clases de Nickol le rindieron un homenaje en el que fue su pupitre. “La Chiquis. Vive en nuestros corazones. 10-08 te recordará campeona” es el mensaje que adornan unas velas en forma de corazón.

Nickol será inolvidable para todo un país que se conmocionó por su trágica partida.

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