Siete días después de la muerte de Fernando Monsalve en la vía Zapatoca- Girón mientras transportaba café y verduras, se conocen más detalles sobre el macabro plan que tendrían Carlos Hernando Jaimes García, Edwin Ferley Buitrago Gómez, Samuel Andrés Santos Toloza y Júnior Harvey Zorro Jerez para hurtarle el vehículo con el que sería un valioso cargamento.
Todo se habría ‘tejido’ desde Zapatoca, tierra natal del conductor. Una de las mentes malévolas sería el sobrino de una conocida de la familia, quien vivía a unas cuantas casas de Monsalve, en el barrio Las Mercedes.
Se trata de Júnior Harvey Zorro Jerez, de 25 años, a quien últimamente lo habrían visto visitar muy seguido a su tía. Durante este tiempo no habría despertado sospecha de nadie, pues el sujeto es oriundo de esta tierra y era normal verlo deambular por los alrededores.
Sin embargo, las intensas visitas a su familiar serían parte de la ‘inteligencia’ que le estarían haciendo a Fernando Monsalve.
Allegados de la víctima aseguran que un día antes del crimen, los cómplices de Zorro Jerez fueron visto en el pueblo.
Luego de ser capturados, los cuatro fueron enviados a la cárcel. Zorro Jerez sería quien conducía el camión que minutos antes le había robado al comerciante asesinado. Cayó cuando se movilizaba por la vía a Chimitá.
Toda la información suministrada por su familiares y conocidos serían pieza clave en la investigación.
Durante las honras fúnebres Fernando Monsalve Romero, de 53 años, fue acompañado por decenas de personas que manifestaron su cariño e indignación por lo ocurrido.
El ataque implacable
El pasado 24 de enero, Monsalve fue víctima junto con su esposa y ayudante de un violento robo cuando se dirigían a Bucaramanga por la vía Zapatoca -Girón a bordo de su camión cargado de café y verduras. Tres hombres los interceptaron, les bloquearon el paso, los bajaron y de una forma despiadada los amarraron de manos y pies para que no se pudieran defender, pero todo no quedó ahí, los lanzaron hacia una alcantarilla. A Monsalve lo habrían golpeado en la cabeza; bastó para cortarle la existencia.
Una vez pudieron liberarse, reportaron el hecho ante las autoridades que realizaban un operativo de verificación de antecedentes en Nuevo Girón. Ahí interceptaron a los asesinos.
Aunque trataron de huir, fueron capturados. El vehículo en el que iban habría sido reportado como robado la noche anterior en Floridablanca.
Les hallaron una pistola y un revólver calibre 38 milímetros. El cuarto sospechoso fue detenido junto al camión de estacas, cuando se movilizaba por la vía a Chimitá
