Los supuestos turistas que llevaban días en la capital de Santander, fueron capturados por la Policía en una persecución después de que cometieran un robo en un restaurante de la carrera 28 con calle 40 el domingo.
Habrían amedrentado con un arma traumática a los clientes – cera de 14 comensales – para robarles sus pertenencias y salir huyendo a bordo de dos motocicletas.
Sin embargo, las víctimas acudieron rápido a las autoridades, entregando descripciones detalladas de los delincuentes así como de los objetos hurtados.
Desde el cuadrante de la Policía activaron un ‘Plan Candado’ que les cerró muy rápido todas las vías de escape a los sospechosos, hasta que fueron interceptados a unas cuatro cuadras del lugar donde cometieron el delito.
Al requisar a los ‘paisas’ las autoridades les hallaron un arma traumática (revólver), tres celulares de alta gama y otros elementos reportados por las personas afectadas, además de inmovilizarles las motos.
Investigadores de la Sijin aseguran que estos hombres podrían ser los responsables de otros hurtos cometidos con la misma modalidad de intimidación a personas en establecimientos comerciales.
La sospecha es alentada por una publicación hecha en Twitter por el propio alcalde de Bucaramanga Juan Carlos Cárdenas, que indica que estos antioqueños habrían estado detrás del violento robo ocurrido el sábado a un restaurante en la carrera 36 con 43 de Cabecera. Pero todo sigue en indagaciones de la Policía Judicial.
Mientras eso se confirma, el trío quedó en manos de la Fiscalía para responder por hurto calificado y agravado ante la Justicia santandereana.
