El rumor que corrió sobre un millonario fleteo en la carrera 35 con calle 52 de Cabecera en Bucaramanga, terminó siendo solo un hurto de menor cuantía, cometido a una mujer que ‘dio papaya’ al dejar la puerta de su carro abierta.
Mientras iba a un negocio y regresaba, los ‘amigos de lo ajeno’ se percataron de su error y aprovecharon para sacarle un celular, un computador y los documentos del vehículo.
Aunque los vecinos corrieron a avisarle a la conductora, quien salió asustada del local, ya no había rastro de los delincuentes, quienes – según dijeron los vecinos – escaparon a bordo de una motocicleta con rumbo desconocido.
De todas maneras, las autoridades indicaron que cuentan con algunas pistas importantes para dar con los ladrones. Cabecera está en la mira de los ladrones.