Los asesinos atacaron a Edwin Díaz por la espalda, en Bucaramanga

Ocurrió en la carrera 19A con calle 124, del barrio Cristal Alto, al sur de Bucaramanga cuando Díaz Aguillón se disponía a sacar su moto.
Es claro que lo seguían de manera sigilosa dos hombres a bordo de una BWS color negro. Ese era el ‘momento perfecto’. El parrillero se bajó, lo acorraló en la puerta y le propinó cuatro disparos mortales.
Cuando los vecinos escucharon las detonaciones salieron para saber qué había pasado; solo vieron a los dos sujetos marcharse a gran velocidad hacia el norte. Nadie los pudo detener.
Edwin no tuvo oportunidad de defenderse, murió en el lugar. Pocos lo conocían, pues al parecer no era del barrio y ese día estaba de visita donde su novia, en la carrera 20, pero la moto la guardaba a una cuadra. Y eso también lo sabían los criminales.
Pasadas las 7:00 de la noche, ingresó al garaje para sacar su ‘nave’ e irse para su casa al norte de Bucaramanga, pero lo asesinaron de manera cruel con un revólver calibre 38. Recibió 3 impactos certeros en la cabeza y uno en la espalda, que le cortaron la respiración de inmediato.
“La noticia de que habían matado a un muchacho cerca a la cancha se regó rápido, pero llegamos a mirar y no sabíamos quién era. Dicen que era hermano de un Policía, pero no sabemos si es cierto”, comentó uno de los residentes de El Cristal Alto.
Personas cercanas aseguran que no tendría amenazas o problemas graves que pudieran poner en riesgo su vida. Solo los asesinos que llegaron por él con tanta precisión saben quién, por qué le dieron muerte de esa manera. En el instante hubo muchas especulaciones, pero no hay hipótesis certera.