Lo que parecía ser una entrega más en la rutina de Orlando Vesga Badillo, comerciante de 57 años de edad, terminó en tragedia. La tarde del sábado 25 de enero, cerca de las 12:50 p.m., Orlando y su pareja se dirigieron en motocicleta al barrio Girardot de Bucaramanga para entregar un pedido de tamales solicitado por WhatsApp.
El destino de entrega de los tamales era la carrera 4 #24-55, pero al llegar a ese lugar lo esperaba la muerte.
Mientras su pareja golpeaba la puerta de la casa para anunciar la llegada de los tamales, Orlando aguardaba sobre la motocicleta. De repente, un hombre desconocido se acercó por detrás. Vestía una camiseta gris, pantalón de jean azul e iba en una motocicleta Pulsar de color azul. Sin previo aviso, el atacante desenfundó un arma cortopunzante y en un acto rápido y violento, le propinó dos heridas al comerciante.
El agresor huyó en cuestión de segundos, dejando a Orlando gravemente herido. Testigos y vecinos, alarmados por el ataque, lo trasladaron de inmediato al Hospital Universitario de Santander. Allí, a pesar de los esfuerzos médicos, la vida de Orlando se apagó a las 2:55 p.m.
¿Intolerancia o disputa familiar?
Según el reporte policial las primeras investigaciones hay dos hipótesis que apuntan a móviles relacionados con intolerancia o posibles disputas personales.
Aunque su pareja asegura que Orlando no tenía problemas, sí mencionó que Vesga tenía disputas con un hermano por temas de herencia.
Amigos de este comerciante han dejado mensajes en sus redes sociales pronunciándose sobre los hechos. “Lamento el vil asesinato de un gran amigo y dirigente social, Orlando Vesga Badillo, con el compartí muchos años de vida en el trajinar político y comunal de los barrios populares de Bucaramanga. Amigo Orlando tu recuerdo seguirá permanente en mi diario vivir, me duele su partida y solo le pido a Dios que lo tenga en su santa gloria y que brille por siempre la luz perpetua. Paz en su tumba, mi sentimiento de solidaridad para toda su familia y amigos” Afirmó un presunto amigo de Vesga por la red social Facebook.
Por ahora, las autoridades han iniciado labores de vecindario y recopilación de información para identificar a los posibles responsables.
