Durante tres días, Deiver Lerecit Quintero, de 27 años, luchó por su vida en el Hospital Universitario de Santander, HUS.
Cuatro disparos obligaron a los médicos a intervenirlo quirúrgicamente de manera inmediata. Sin embargo, los esfuerzos fueron en vano. Sus lesiones no dieron tregua. Sobre la 1:20 de la madrugada del 22 de septiembre, fue declarado muerto.
Las autoridades desconocen quién lo trasladó al centro hospitalario. De acuerdo con la versión entregada por testigos, a Deiver Quintero le dispararon en la noche del 19 de septiembre en una cancha del barrio Pablo Sexto.
Un sujeto en motocicleta llegó hasta el escenario deportivo sobre 8:40 de la noche. Con el casco totalmente cerrado y oscuro por el visor polarizado, desenfundó su arma de fuego y acribilló a Quintero.
Los proyectiles le impactaron el tórax, del lado izquierdo y derecho; el abdomen y el antebrazo. Allegados le aseguraron a las autoridades que desconocen las causas por las que Deiver fue atacado.
El reporte de la Policía Metropolitana de Bucaramanga señaló que la víctima fatal, minutos antes de ser atacada, estaba consumiendo sustancias psicoactivas con otras personas, de las que se desconoce su identidad.
Deiver Quintero se dedicaba a la zapatería, según le contaron sus familiares a las autoridades. En el Sistema Penal Oral Acusatorio, la víctima registra dos anotaciones judiciales por el delito de tráfico de estupefacientes durante el 2024 y una por receptación de 2023.
Racha de homicidios en Bucaramanga y su área metropolitana
Durante las últimas tres semanas en Bucaramanga y su área metropolitana, sicarios han asesinado por lo menos a 12 personas. El último homicidio ocurrió a las 4:10 p.m. del sábado 21 de septiembre en la calle 2 con carrera 22 del barrio Villa de los Caballeros en Girón.
La víctima fue identificada como Luis Carlos Sarmiento Jaimes, de 33 años. De acuerdo con la información recolectada por la Policía Metropolitana de Bucaramanga, los responsables fueron dos sujetos a bordo de una motocicleta, quienes además llevaban cascos abiertos.
Ellos interceptaron a Luis Carlos y luego el parrillero desenfundó un arma y empezó a disparar sin ningún tipo de piedad en contra de la humanidad del hombre de 33 años.
Q’hubo conoció que Luis Carlos recibió cuatro disparos en los brazos, dos más en el tórax y tres más en la pierna izquierda.
Los crímenes que han ocurrido en el último mes, en su mayoría, están relacionados con el ajuste de cuentas por las rentas del microtráfico, de acuerdo con las autoridades.