Según la Fiscalía, estas personas habrían cobrado por ventanilla millonarias sumas de dinero giradas en cheques.
En la investigación, liderada por la Dirección Especializada contra el Lavado de Activos, se estableció que los procesados no tendrían el perfil económico para justificar los movimientos financieros.
Estos recursos, en el papel, serían soportados como si fueran anticipos por exportaciones de café, carbón, ferroníquel, petróleo y sus derivados, entre otros.
«Los indicios dan cuenta de que se trataría de operaciones ficticias para dar apariencia de legalidad al dinero, cuyo origen se presume de actividades ilícitas», señaló la Fiscalía.
En los registros figuran giros de Venezuela, Panamá y China, a nombre de una empresa en Colombia que, en tres años (de 2014 a 2017), recibió transferencias internacionales por 58.000 millones de pesos. Parte de esta suma es la que, de manera fraccionada, habrían retirado los cuatro detenidos.
Durante las audiencias concentradas, las personas investigadas recibieron medida de aseguramiento en centro carcelario.