Ramiro*, un bumangués de 37 años, se quedó sin dinero al fin de mes y decidió acudir a un sistema de préstamos que le pareció cómodo y sencillo. Lo encontró en redes sociales. Le prometían un desembolso de inmediato. Sin requisitos legales de ningún tipo. Solo debía descargar una aplicación y completar los datos que le pedía el formulario.
La app, conocida como ‘Don Lucash’, le desembolsó 380 mil pesos inmediatamente a su cuenta de ahorros en Bancolombia. Por el momento todo iba bien. Ramiro retiró la suma para suplir sus gastos, pero el calvario empezó tres días después.
“Me habían dicho que debía pagar a fin de mes. Yo estaba tranquilo. No tenía ningún inconveniente en pagar lo que me prestaron, pero a los tres días, me dijeron que yo ya debía 760 mil pesos. No entendí por qué. Me asusté y evidentemente no pagué”, le dijo la víctima a Q’hubo.
Aunque tenía preocupación, no imaginó lo que se le venía cuesta arriba. Primero llegaron amenazas desde números extranjeros de países como Perú y Ecuador. El tono ya no era amable como cuando le ofrecieron el préstamo. Ahora, los insultos y las amenazas eran comunes en los mensajes de texto que recibía.
La aplicación había robado todos sus datos. Números de teléfono de familiares, tenía permiso a su ubicación, tenía acceso a su galería y a su cámara. El chantaje había empezado. Los supuestos prestamistas empezaron a enviarle mensajes amenazantes a sus familiares. Asegurando que Ramón* era un violador.
“Se lo enviaron a la mamá de mi hija. Todos mis familiares saben del chantaje. Es terrible porque son muy insistentes. No sé qué hacer porque siguen desembolsando dinero en mi cuenta”, añadió la víctima.
“No sabemos si este dinero proviene de lavado de activos o mafias nacionales o internacionales. Lo cierto es que una vez la persona le da acceso a su información en el celular, es una tarea que requiere de muchos pasos para deshacerse de los estafadores”, aclaró un vocero de la entidad.
Así las cosas, a Ramiro le toca desaparecerse de todas sus redes sociales, cambiar de número y explicarle a sus contactos el chantaje del que ha venido siendo víctima.
¿Qué hacer ante un caso de estafa y usura por gota a gota virtual?
El Gaula de la Policía de Santander hizo una serie de recomendaciones para evitar caer en esta estafa:
1. Desconfiar de los términos accesibles de préstamos en línea: las autoridades señalan que es importante que las personas desconfíen de la rapidez y la falta de requisitos a la hora de asumir una deuda. “Lo que promete mucho, en realidad es una estafa o una usura”, añadió un vocero de la entidad.
2. Evite descargar aplicaciones de préstamos o que le ofrezcan dinero: Estas aplicaciones, así estén en los servicios de Play Store no son confiables. Mafias las usan para robar y comercializar datos de quiénes las descargan. “Otorgar los permisos a estas aplicaciones es una completa trampa”, aseguró un uniformado del Gaula de Santander.
3. No crea en los anuncios en redes sociales: es un error confiar plenamente en publicaciones de Facebook o demás redes sociales que ofrecen links para adquirir una deuda. La suplantación de la identidad es algo que ocurre a menudo.
Si el ciudadano no pudo prevenir y cayó en la trampa del gota a gota virtual debe seguir esta serie de pasos recomendados por las autoridades:
1.Desactivar la cuenta de Facebook
2. Eliminar la aplicación de préstamos que instaló.
3. Quitar los permisos de ubicación en el celular
4. Envíar un mensaje de difusión a familiares y amigos en WhatsApp o mensajes de texto, explicando la modalidad de estafa en la que ha caído.
5. Cambiar de número de celular para evitar que el acoso se perpetúe
6. Informar a la entidad bancaria sobre el ingreso indeseado de dinero a sus cuentas
El Gaula de Santander hace un llamado a la comunidad para que se evite caer en esta cadena de préstamos impagables, y alerta, que esta modalidad de usura ha llevado a bumangueses a internarse en clínicas psiquiátricas por los efectos en la salud mental que desencadena este chantaje.