Sobre el mediodía de este domingo 25 de agosto, los sonidos de varios disparos en la carrera 23 con calle 14 alertaron a las unidades de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, quienes decidieron acordonar el área para evitar una tragedia.
De acuerdo con testigos, la persona que estaba disparando sería el vigilante de una prendería, conocida como La Favorita. Al parecer, el hombre estaba bajo los efectos del alcohol.
“El vigilante tenía que cuidar el negocio, pero estaba ingiriendo bebidas alcohólicas dentro del establecimiento, en compañía de sus amigos. En un momento de locura decide disparar. Esto alerta a la Policía, por lo que el sujeto decide esconderse en la propiedad”, contó uno de los testigos del hecho.
Q’hubo consultó con las autoridades, quienes señalaron que, efectivamente, las patrullas del sector recibieron el llamado de emergencia y llegaron hasta la vivienda en donde se escucharon las detonaciones.
La Policía Metropolitana de Bucaramanga informó que el hombre, de 50 años, fue capturado por los delitos de porte ilegal de armas de fuego y daño en bien ajeno.
El comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, general Henry Yesid Bello, señaló que el hombre tenía en su poder un revólver calibre 38, con el que había disparado a la fachada de un edificio.
“Hemos logrado la captura de un delincuente en el barrio San Francisco. Esta persona se encontraba al interior de un establecimiento de comercio. Las patrullas, que se encontraban en el sector, acuden para lograr la captura y la incautación de un arma de fuego”, agregó el general.
Hasta el momento no se han reportado heridos. Las versiones que circulaban sobre un posible hurto no son ciertas. Las autoridades también descartaron que esta situación se tratase de una toma de rehenes.
