El voraz incendio que se presentó desde de la noche de ayer lunes 22 de enero, en la vereda Ucatá, perteneciente al municipio de Tona, Santander, va a gran velocidad y sigue afectando la vegetación de la zona. Tanto así que ahora consume parte del páramo de Berlín.
Tras el grave incendio, el gobernador de Santander, Juvenal Díaz Mateus, informó que adelantan las labores necesarias para atender la emergencia, y que al lugar llegará apoyo aéreo.
«Atienden la emergencia los bomberos del municipio de Tona con apoyo de Bucaramanga y Floridablanca, y del Ejército Nacional. Se inician protocolos para apoyo de helicópteros lo antes posible», dijo Díaz Mateus.
Según la versión del alcalde de Tona, Jesús Santiago Gutiérrez, a medios nacionales, “desde las cinco de la mañana estamos trabajando para controlar pero ha sido un poco dispendioso”.
También manifestó que, aunque es complicado calcular en estos momentos la afectación, se estima que por lo menos las llamas han consumido seis hectáreas de vegetación, afectando principalmente arbustos de páramo, frailejones, pinos y pajonales.
Dicha conflagración fue reportada por la misma comunidad desde ayer, y al parecer se desató por la explosión de un transformador.
De acuerdo con Maithe Monsalve, habitante de la zona rural cercana al corredor vial que comunica a Bucaramanga con Pamplona, “se reventó una guaya de un transformador, y al reventarse hizo chispa y se generó el incendio. Tampoco tenemos luz desde ayer (lunes), por aquí no ha aparecido nadie arreglar”.
Los habitantes del sector también manifestaron que las llamas han venido creciendo a tal punto que está en riesgo la escuela de la vereda.
“Anoche iban como unos 100 metros, ahora ya agarró alto el incendio. Esto es al frente de la escuelita que tenemos acá, todo alrededor se incendió. Se está metiendo la candela debajo de los pinos. Nosotros estamos más o menos a un kilómetro de la base del Ejército”, dijo la residente del lugar a Vanguardia.
