“Estamos consternados y queremos olvidar lo que pasó”, con estas palabras un ciudadano de Bucaramanga le confirmó a Q’hubo el dramático momento que vivió con su familia el pasado fin de semana cuando regresaban de un viaje de San Alberto, Cesar.
El ciudadano viajaba con su esposa, su hijo de cinco años de edad y su madre. Cuando regresaban a Bucaramanga, ya en jurisdicción de El Playón, una de las llantas de la camioneta en la que se movilizaban se pinchó, llegando a un puente, y tuvieron que detener la marcha. Eran las 9 de la noche del sábado 11 de noviembre.
Aunque el ciudadano que venía conduciendo no quiso dar más detalles a Vanguardia, su esposa si contó lo que recuerda de lo sucedido.
Según su relato, cuando se detuvieron a cambiar la llanta, un hombre joven se les acercó a brindarles ayuda y les colaboró a ‘despinchar’.
“El joven recibió una llamada en su celular y se fue. Empezamos a recoger las herramientas de carretera y en ese momento salieron dos personas de la zona boscosa, vestían de civil, y nos dijeron que eran del ELN, a mi esposo le quitaron las llaves y lo hicieron que se fuera en la parte de atrás”, señaló la mujer.
Los presuntos integrantes del ELN amenazaron a la familia con una pistola. Uno de los delincuentes condujo la camioneta y kilómetros más adelante frenó para bajar a los ocupantes.
“Pararon en la vía nacional, abrieron el capó del vehículo para fingir que estábamos varados y nos bajaron. A mi esposo lo amenazaron con una pistola y nos llevaron hacia el monte. Nos quitaron celulares, joyas, documentos y se llevaron la camioneta”, relató.
Con los cordones de los zapatos los amordazaron, mientras el esposo de la mujer le recriminaba al delincuente que quedó con ellos por el robo de la camioneta. Los sujetos le manifestaron que la necesitaban para llevar un cargamento. Además, amenazaba con pegarle un tiro si seguía hablando.
Duraron tres horas amordazados. El delincuente que los vigilaba recibía llamadas. Después de un tiempo les dijo que los dejaba solos y que ya volvía, pero que no se fueran a soltar
“Mi esposo como pudo se soltó, me desamarró a mí, él salió hacia la vía nacional, se le atravesó a un furgón que paró y nos llevó hasta una Estación de Policía. Nos quitaron los celulares, pero nos devolvieron las tarjetas SIM”, recordó la mujer víctima del hurto.
De la camioneta, una Toyota Fortuner color gris de placas MHX-123, matriculada en Barranquilla, aun se desconoce su paradero. Los afectados ya interpusieron la denuncia ante la Fiscalía.
Las autoridades han manifestado que el hecho habría sido cometido por delincuencia común ya que no hay registro de presencia del ELN en Santander.
