Treinta y dos cicatrices quedaron de por vida en la espalada y en el cuello de Dayana Alexandra, una joven de tan solo 19 años de edad, que estuvo a punto de morir tras ser atacada con arma blanca por el hombre que en reiteradas ocasiones juró amarla.
Los hechos ocurrieron el pasado 9 de octubre en el municipio de Puerto Boyacá, cuando valiéndose de engaños, Johan Esteban Ciro Quintero, expareja sentimental de Dayana, logró convencerla de que llegara a su lugar de residencia para dialogar. Sin embargo, cuando la mujer quiso irse y salir de la vivienda, se desató lo peor.La furia del hombre, con quien Dayana había sostenido una relación de casi tres años la cual, meses atrás, ella misma había terminado por las constantes agresiones que recibía, fue incontrolable. Johan, cegado por la ira y los celos, al enterarse que la joven había decidido rehacer su vida con otra persona, presuntamente, la atacó brutalmente con un cuchillo, en treinta y dos oportunidades.“El mediante engaños, logra que ella llegue a la casa, y luego le impidió retirarse y le ocasionó 32 lesiones con arma corto punzante y posterior a ello, el victimario toma la decisión de autolesionarse”, informó la Policía del Magdalena Medio.
Tras escuchar los gritos de auxilio, varios vecinos lograron ingresar al inmueble y dar aviso a las autoridades; quienes al llegar, encontraron a las dos personas con heridas de arma blanca. Ambos fueron trasladados de urgencias a un centro asistencial del municipio.
En el lugar de los hechos las autoridades hallaron una carta en la que el agresor plasmó sus intenciones de asesinar a su expareja y posteriormente, quitarse la vida; argumentando que si “no era para él, no era para nadie”.
Al pasar una semana, cuando el hombre se recuperó de las lesiones e intentó salir del Hospital de Puerto Boyacá, uniformados de la Policía lograron su captura por el delito de feminicidio agravado en grado de tentativa. Aunque el presunto agresor no aceptó cargos, un juez de la República le dictó medida de aseguramiento en centro carcelario.
Entre tanto, la joven víctima, quien también fue dada de alta médica, recibe atención y apoyo psicosocial. “Ya todo pasó; yo estoy tratando de dejar ese episodio atrás y que la justicia actúe; estoy en todo el proceso de recibir apoyo psicológico”, expresó la víctima.
