Hace dos años, Edinson Albeiro Calderón Anaya, de 37 años, salió de Colombia rumbo a Estados Unidos con la ilusión de cumplir su ‘sueño americano’. Trabaja como eléctrico en California y todo el dinero que recibía lo ahorraba para volver a su tierra a comprar un terreno para construir una casa para su familia. Ese anhelado regreso se daría entre diciembre de 2021 y enero del próximo año.
Sin embargo, sus planes se truncaron. Un accidente de tránsito cambió de forma trágica la historia. Falleció después de que perdiera el control del vehículo en que viajaba con un amigo y cayera a un barranco.
Edinson -se presume- no llevaba el cinturón de seguridad y salió expulsado. Perdió la vida en el lugar.
La noticia devastó a sus seres queridos, quienes estuvieron varios días sin tener noticias.
Sagrada sepultura
Desde el momento en que se enteraron de su muerte, la familia no ha tenido paz y solo busca la forma de traerlo nuevamente a Lebrija, de donde se fue un día a buscar una nueva oportunidad de vida. Quieren darle sagrada sepultura entre los suyos.
“A un primo que también vive en Estados Unidos fue a quien le reportaron el hecho, él ya lo estaba buscando. El cuerpo estaba en una morgue y tuvo que ir a reconocerlo”, manifestó su hermano, Fabián Robles Anaya.
Desde ese momento han mantenido comunicación constante, pues desde allá adelantan todos los trámites necesarios para repatriar el cuerpo; sin embargo, además de papeleo, deben asumir costos elevados con los que su familia no cuenta.
“Entre todos nos estamos rebuscando el dinero para traerlo así sea una moneda o un billete, todo eso nos sirve.
“Queremos darle cristiana sepultura. Son aproximadamente 35 millones de pesos los que tenemos que pagar.
“Pedimos a todos los que puedan ayudarnos que nos aporten lo que sea”, comentó el hermano de Edinson.
