Una dolorosa tragedia se presentó al interior de un hotel campestre de la vereda Barro Blanco, en Piedecuesta, tras la muerte por ahogamiento de un niño de 2 años.
El lamentable hecho, que es materia de investigación por parte de las autoridades judiciales, ocurrió sobre las 11:30 del pasado jueves 7 de septiembre .
A esa hora, de acuerdo con el reporte conocido por la Policía, la madre del menor se encontraba laborando como administradora del hotel y su hijo estaba con ella.
Al no observar al menor por un par de minutos, la mujer empezó la búsqueda por diferentes zonas del hotel hasta que lo encontró flotando en la piscina del lugar.
Enseguida, el niño fue sacado del agua y trasladado de urgencia en un vehículo hasta la Clínica de Piedecuesta, distante aproximadamente unos 15 minutos.
Allí, pese a los esfuerzos del personal médico, se confirmó que el menor de edad ya había fallecido.
Agentes de la Sijín de la Policía se encargaron de realizar la inspección técnica del cuerpo y trasladarlo a la morgue del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses, en donde permanece en la mañana de este viernes 9 de septiembre.
Por ahora, se investigan las causas por las exactas en las que el pequeño cayó a la piscina y Medicina Legal verificará si la muerte fue por inmersión.
Van dos casos en cuatro días
Con este, de manera desafortunada, ya son dos los casos de muertes de niños que han muerto ahogados en piscinas en Santander durante esta semana.
El pasado lunes, un menor de 4 años de edad murió al caer a una piscina en la vereda Santo Domingo de Lebrija, Santander, distante a 30 minutos del casco urbano.
Las autoridades insisten les a los padres de familia sobre la importancia de estar muy pendientes y atentos en el cuidado de sus hijos cuando se encuentren cerca de estanques, piscinas, ríos o quebradas, evitando que se presenten este tipo de estos hechos trágicos.
