Inconsciente, con pronóstico reservado debido a un severo trauma craneoencefálico y quizá sin saber lo que ocurrió después de llegar a la intersección de la carrera 27 con avenida González Valencia, permanece en una UCI Ángelo Umbría Agüero, el motociclista venezolano de 24 años de edad, señalado de cometer una imprudencia que le costó la vida a la joven estudiante de medicina, María Juliana Murzi Pabón.
Según un agente de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga se espera su evolución ya que el golpe que recibió en la cabeza fue muy fuerte.
“El reporte que ha entregado el centro médico es que su estado de salud es reservado. Alcanzó a ser llevado por los paramédicos después del fuerte golpe con la motociclista”, indicó el funcionario.
Esta persona, según lo recopilado por las autoridades, trabaja como domiciliario y en la madrugada de ayer lunes, cuando descendía por la avenida González Valencia, llevaba unos desayunos en su motocicleta de placas Suzuki GN, color negro, de placas PPI-04E.
Q’hubo conoció que el domiciliario no tenía ningún tipo de documento en regla que le permitiera estar desplazándose por las calles de la ciudad.
Desde el pasado 16 de julio, hace casi un mes, esta motocicleta no tenía vigente el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito, Soat. A esto se suma que tampoco se encontraba vigente la revisión técnico mecánica y la licencia de conducir.
“No tenía ninguno de los tres documentos (Soat, revisión técnico mecánica al día y licencia de conducir). Se procedió a imponer los tres ‘comparendos’”, confirmó Carlos Bueno, director de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga. El valor por estas tres infracciones de tránsito supera los $2 millones 700 mil.
Sobre las causas del accidente, se conoció que hay un video en poder de las autoridades , pero que se mantiene en reserva, por ahora, ya se realizó un croquis preliminar y se adelantas la acciones investigativas para corroborar si fue el conductor extranjero el que omitió el pare y pasó la intersección a toda velocidad.