Su cuerpo estaba desnudo y registraba graves signos de violencia que hoy son materia de investigación para las autoridades judiciales.
La comunidad de la ribera del río, en la zona rural de la capital santandereana, dio aviso del macabro hallazgo a la Policía tras quedar el cadáver atrapado con algunas rocas.
En el lugar hicieron presencia los uniformados, enseguida el Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, y se pidió apoyo al Cuerpo de Bomberos de Bucaramanga para rescatarlo de la fuente hídrica.
Con equipos y herramientas especiales, los socorristas sacaron al hombre sin vida de las aguas y se adelantó la diligencia de inspección técnica.
Lo que sorprendió de entrada fue una herida abierta, bastante profunda, que atravesaba todo el cuello, así como otra lesión en uno de los brazos.
Sobre las causas de esta muerte violenta se estudia un homicidio, se descartó que hubiera sido por ahogamiento en el río, cuyo nivel de agua no alcanzaba ni los 40 centímetros.
Ese día, no hubo forma de identificar al fallecido dado que no portaba nada y ninguna persona lo reconoció.
El cadáver fue llevado a la morgue del Instituto de Medicina Leal y Ciencias Forenses, seccional Bucaramanga, en donde tras un trabajo de dactiloscopia se pudo establecer la plena identidad del occiso.
Ahora, investigadores del CTI tratan de esclarecer los hechos violentos que rodean la muerte de Óscar Javier. Se cree que este hombre habría sido degollado y tirado a la fuente hídrica.
