Por medio de redes sociales, una red dedicada al proxenetismo invitaba a clientes a tener encuentros sexuales con jóvenes colombianas y extranjeras en los que también había menores de edad.
Pero no solo había servicios sexuales. El lugar ofrecía dos eventos ‘exclusivos’: las ‘Fiestas Blancas’ donde se expedían dosis de cocaína, y las ‘Fiestas Verdes’ en las que la droga que se vendía eran cigarrillos de marihuana.
La información sobre cómo funcionaba este lugar llegó a las autoridades mediante información ciudadana. Es por eso que la Policía, en conjunto con la Fiscalía y el apoyo del Ejército y la Alcaldía de Bucaramanga, lograron desarticular a la red que se dedicaba al proxenetismo en una vivienda de tres pisos del barrio La Joya.
Las acciones también contaron con el apoyo de la ONG Liberandus International que trabaja por erradicar la prostitución en Latinoamérica.
Con una orden de registro y allanamiento, los uniformados llegaron al inmueble, que tenía la particularidad que estaba cerca de una institución educativa. En el lugar se lograron las capturas de una mujer de 32 años conocida con el alias de ‘Marce’ y dos hombres de 36 y 42, identificados con los alias de ‘Andrés’ y ‘Gabriel’.
Los capturados conformaban una red de proxenetismo conocida como ‘Los Miller’ que ofrecían los encuentros sexuales a través de plataformas digitales. Contrataban a colombianas y extranjeras que tuvieran necesidades económicas para inducirlas a la prostitución.
A los clientes que los contactaban les ofrecían catálogos digitales, fotos o videos, en los que incluían a las menores de edad. Los servicios podrían ser tomados en la vivienda de La Joya o a domicilio.
Es así como después de dos meses de investigaciones se logró dar con la captura de las tres personas y en el momento del operativo en el lugar se encontraron 11 mujeres que eran explotadas. Tres de ellas era de nacionalidad extranjera y dos menores de 14 y 16 años.
La directora seccional de Fiscalías en Santander, Marisol Ramírez Rodríguez, aseguró que las adolescentes quedaron bajo la protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar para el restablecimiento de sus derechos.
“Con la desarticulación de este grupo delincuencial se ataca significativamente la cadena criminal del proxenetismo, que afecta la integridad sexual de niñas, adolescentes y mujeres nacionales y extranjeras quienes son explotadas sexualmente por delincuentes que se lucran económicamente por el trabajo que realizan las personas víctimas de estos delitos”, indicó la directora.
Los capturados deberán responder por los delitos de proxenetismo con menor de edad, concierto para delinquir, inducción a la prostitución, estímulo a la prostitución, constreñimiento a la prostitución, utilización de medios de comunicación para ofrecer actividades sexuales con personas menores de 18 años y tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.