Lo habían llevado hasta el centro médico en una motocicleta desde el parque del barrio Esperanza 2, en el norte de la ciudad, en donde tuvo lugar un violento enfrentamiento.
Allí, en plena madrugada, por motivos que son investigados por las autoridades, el adolescente se enfrascó en una riña con un sujeto de 24 años. El más joven, durante el enfrentamiento, se llevó las de perder: le pegaron dos puñaladas en el pecho.
Pese a todos los esfuerzos del personal médico, nada se pudo hacer por mantenerlo con vida. Sobre las 1:30 a.m. fue declarado muerto.
El agresor, al ver el daño causado, emprendió la fuga del sitio en un automóvil Chevrolet Spark antes de la llegada de la Policía.
Investigadores arribaron al lugar a recopilar las evidencias respectivas, así como adelantar el levantamiento del cadáver del menor de edad en el hospital.
Q’hubo conoció que adolescente había sido aprehendido hace unos días por el presunto delito de lesiones personales y también, al parecer, es señalado de estar involucrado en un homicidio ocurrido recientemente en la zona.
“Un joven pierde la vida en una situación de una riña con armas cortopunzantes. Una vez revisada la información, este joven contaba con unos antecedentes de tipo judicial por lo cual en la investigación que se está desarrollando se tienen en cuenta estos elementos”, dio a conocer el coronel Juan Andrés Guzmán, subcomandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
Las autoridades investigan si todos los hechos están correlacionados y la muerte obedeció algún tipo de ‘venganza’ o ‘retaliación’.
El occiso vivía en el barrio La Esperanza 3 y había estudiado hasta séptimo de bachillerato.
El cadáver permanecía en la morgue del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses a la espera de ser entregado a sus familiares para su despedida.